¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"¿Porqué amo a Jschlatt?"
Bueno... Es un chico lindo, gran parte de la escuela lo ama y... Eso es lo único que tengo que decir sobre él.
En un principio las cosas con él siempre fueron muy reconfortantes, agradables y románticas, pero bueno en este momento de nuestras vidas el simplemente... Dejo de serlo.
"Jschlatt es el tipo de novio que..."
— Eres muy tierna. —Dijo entre risas mientras toca el pelo de una chica y esta se sonrojaba por la timidez.
Yo los miraba cruzando los brazos e intentando no mostrar sus claros justificados celos, sin embargo siempre se prometió no ser una persona celosa para su novio y que siempre iba a confiar en él entonces nunca reclama aún cuando esos comportamientos se le hagan dolorosos de ver.
"Si, Jschlatt es un poco así."
Tengo que admitir que no suelo comer rápido para que mi digestión sea buena y cada vez que me siento con él me queda claro mi lentitud.
— Termine. —Agarro su bandeja y se levantó, Quackity se sorprendió y lo vio empezar a caminar para irse.
— Pero yo aún no termino. —Dice con una cara apenada.
Si termina primero en almorzar, se va aún cuando su novio aún no ha terminado de comer.
"Lo que también hace es..."
Ding Dong Ding Dong.
— Termino la clase, pueden irse a casa. —Todos empezaron a irse.
Y Quackity se encontraba apresurado guardando sus cosas en su linda mochila azul, se la coloca y va rápidamente donde su novio.
— ¡Vamos, Jschlatt! —Le habla sonriente, este lo mira de manera despectiva por unos segundos.
— Pero si voy al cibercafé. —Responde con una sonrisa, eso sorprende al más bajo.
— ¿Qué? Pero prometiste acompañarme a mi casa...
Cuando le pido que me acompañe a casa.
— ¿Qué? ¿Eres un niño? —Dice con un tono burlón posando una de sus manos en mi cabeza, hace un pequeño puchero inconsciente.
"Se va al cibercafé sin siquiera mirarme."
— Puedes caminar a casa solo, ¿No? —Se da vuelta para irse, se despide con su mano—. Nos vemos.
Ni siquiera cuando una pelota me golpeó en la cabeza él se preocupó y más bien me ignoro para solo enojarse por no ganar el juego.
"Si..."
"Igual estoy enamorado de él como un estúpido."
— Toma. —Aquel castaño le ofrecía una leche deslactosada de frutilla, le había traído su leche favorita. Sus mejillas se ruborizaron y miro con ilusión ese detalle, pareciera que en sus ojos se formaron estrellas—. Té compré uno, se que hoy vas al club de fotografía y no podrás almorzar. —Agarra la caja de leche con delicadeza.
