SIÉNTEME (COMPLETO)

CAPÍTULO 2

Suena la alarma a las 11 a.m.

Es sábado y yo sigo cansada, así que apagó la alarma y vuelvo a dormir.

- Princesa, ya despierta - decía mi papá mientras me sacudía.

- Ya desperté - respondí mientras me estiraba, todavía acostada.

- ¿No dormiste bien? - preguntó él. - No - le contesté.

- ¿Por qué? - preguntó nuevamente en un tono alarmado.

- Estrés de la escuela, tranquilo - le dije mientras me levantaba de la cama. Entré al baño a lavarme la cara.

- Te esperamos abajo para desayunar - oí a mi papá decir a través de la puerta.

- Si papá, ya voy - contesté y volví a mi cuarto para vestirme.

Después de un rato bajé a desayunar, mi madre me había preparado panqueques con licuado de plátano y también había jugo de naranja, pan tostado y huevos.

- ¿Ya empezaste a considerar tus opciones para la universidad, cariño? - preguntó mi papá, que estaba sentado enfrente de mí.

- Apenas estoy revisando los planes de estudios que tiene cada carrera para poder elegir papá. - dije y después bebí de mi jugo.

-Okay, cuando estés segura hazlo saber para que nos preparemos. - dijo mi mamá viéndome y me sonrió.

- Sí, lo haré - respondí y todos comenzamos a comer en silencio.

Después de desayunar salí de casa y fui a casa de Dayra para hacer nuestro maratón de serie. Al llegar toqué el timbre y me abrió la madre de Dayra.

-Buenos días, señora Miranda - saludé a la madre de Dayra.

- Buenos días, Agatha - respondió mientras me abría la puerta para entrar.

-Hoy es nuestro maratón, por eso vine tan temprano- le dije.

- Sí, Dayra ya me había avisado.

- Enseguida baja - me dijo.

- Gracias - respondí mientras me sentaba en el sillón.

-Hola Agatha- dijo Dayra cuando entró en la sala.

-Hola - respondí mientras me paraba del sofá para abrazarla.

- ¿Lista para el maratón? -me preguntó emocionada.

- Lista - afirmé, mientras levantaba una bolsa de papas. Después de unas horas terminamos la temporada y nos levantamos del sillón para dirigirnos a la cocina a dejar los vasos en los que tomamos el refresco y las pocas papas que habían sobrado.

- ¿Y Violeta? ¿Te dijo por qué ya no vino? - me preguntó Dayra.

-No sé.
-Pues con eso que estaba intentando ver si volvía o no con Harold, quizás por eso no vino, debe de estar con él. - respondí.

-Quizás - dijo de Dayra y terminamos la conversación.

Después de esa corta charla me despedí y me fui a casa, mientras que Dayra se quedó en la cocina lavando los trastes que usamos.

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-Ya estoy en casa -dije al entrar por la puerta principal.

-Hola hija, estoy en la cocina - me dijo mi padre al oír mi voz.

- ¿Qué tal tu tarde? - preguntó cuando vio que entré a la cocina.

-Genial, fui a casa de Dayra y estuvimos viendo una serie.