Recuerdo aquella noche, ambas sabíamos que aquel lugar no era para mí, pero era tanto mi amor por ti que decidí ir.
Todo era muy ruidoso y no podía hablar contigo, y eso era lo que quería en realidad.–Ju, ¿quieres algo de beber?
–No puedo tomar, y tú tampoco deberías tomar, eres la que tiene que conducir.
–Será un poquito, no tomaré una cantidad exagerada como tío en fiesta de año nuevo.Elettra es bastante terca, y no trajo unas copas, trajo la botella completa.
–Es mucho, solo somos nosotras dos.
–Una botella es perfecta para dos personas, animate– Es bastante insistente, entonces lo hice, realmente no quería beber porque me mareo fácilmente, el alcohol y yo no seriamos una buena combinación, como lo fueramos nosotras dos... Aquella luz fuxia resaltaba mucho sus labios en forma de corazón.–¿Se me corrió el labial?
–No, estas perfecta– Casi me da un paro cardíaco. Ella y yo no podríamos ser nada, Elettra es mi mejor amiga desde que éramos niñas, solo hablaba de sus parejas... Claramente HOMBRES que le hacían la vida imposible.Luego de varias botellas, porque sí, Elettra siendo Elettra, yo no tomé porque me conozco y terminaré peor que ella.
–Ju, odio a los hombres...
–Y aún así has tenido muchos novios
–Pero los odio
–¿Qué pasó con...? Dios, han sido tantos que no recuerdo sus nombres.
–Luis ha sido un completo idiota, se acostó con una perra en mi propia cama... Y sigue insistiendo en que volvamos, pero no quiero.
–Pues no lo hagas– Vi su teléfono y constantemente aparecía un número que le marcaba–¿Es él?
–Sí, es bastante idiota, ¿puedo dormir en tu casa?Obviamente la deje, no estaba tan tomada entonces si pudo conducir con normalidad, llegamos a mí casa y lo primero que hizo fue tirarse en mi cama.
–¡Apestas a alcohol, dejaras ese olor en mi cama!
–Entonces me quitaré la camisa– ¿vergüenza? Es algo que ella no tiene, cosa que yo sí.
Que si la he visto sin camisa sí, pero cuando éramos niñas, ahora siendo adultas el cuerpo cambia, y bastante...–No tienes ni un poco de vergüenza
–Tenemos exactamente lo mismo, aunque... Tú desarrollaste más, nunca me he percatado de eso.
–Ahora suenas como una pervertida
–Quiero ver
–¿Qué?– La chica alta me agarro de la camisa e intentó alzarla, entre risas de ambas... Las dos terminamos cayendo encima de la cama.
No sé si fue por el alcohol que estaba corriendo por mis venas, pero mi vergüenza se había ido y por fin pude besar esos labios en forma de corazón, pero al abrir nuevamente mis ojos vi los de Elettra muy abiertos y eso me puso muy nerviosa nuevamente.–Lo lamento, yo no... – La chica alta nuevamente me tiro a la cama, y me comenzó a besar.
–Si hubiera sabido que las mujeres sabían mejor, no hubiera perdido tiempo con idiotas.