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7:32pm

Como un día normal la chica rubia de padres estrictos se encontraba despachando el local sentada esperando a que llegara clientela, solía cerrar a las 10:00pm así que estaba desanimada y agotada, esperaba y rezaba por qué ya fueran las 10:00pm para cerrar e irse a su habitación pero después de un rato llego su mejor amiga.

—¡Nailea hola linda!—una chica de cabello rubio también media alta ojos claros y con una linda sonrisa llego.
—Oh hola Mari ¿vienes a comprar algo? si quieres yo..—la saludo muy apurada y después tomo una bolsa
—ey ey tranquila no vengo a comprar nada solo quería invitarte a la fiesta de Raquel ¿iras?—la chica le dio una invitación para una fiesta esperando una respuesta clara.

—Es el 23 de marzo, yo no creo poder ir-contestó Nailea con un tono triste
—¿Que?—le cambio la cara -como porque no podrás ir?—frunció el ceño
—Verás mis padres aun no me dejan ir de fiesta y mucho menos si es una de Raquel ellos saben como es y me prohibieron hablarle—explico a su amiga con la voz quebrada al decir lo último, ella sabía que sus padres no la dejarían salir a esa fiesta.

—Que aguafiestas son tus padres querida, ¡escapate!—agregó Mari
—Tu estas super loca eso no lo haria ni aunque me paguen millones—movió la cabeza diciendo que no
—Por dios no es nada de otro mundo solo imagínate, veras a chicos en la fiesta beberás a escondidas y tus padres jamás lo sabran—La sonsaco pensando que tal vez asi se animaría a escaparse eh irse de fiesta con ella.

—Mari tu sabes que no me gusta nadie y... no es no, mis padres no me dejaran ir.. y si tu no compraras entonces te invito a que te vayas del local si no quieres que mis padres te corran-apunto la puerta en señal de que se fuera
—Okey señorita yo me voy-Cuando estaba apunto de irse entró un chico alto de rastas empujandola.

—¡Oye tarado fíjate por donde caminas!—Exaltó enojada sobandose su hombro por arriba de las mangas de su chaqueta negra.
—No seas llorona, oye tu—contestó el chico de rastas y después le hablo a Nailea
—Me llamo Nailea y te pido que le pidas disculpas a mi amiga-cruzo los hombros.

—Bien—tenzo la mandibula—Nailea perdón por lo sucedido—rojo los ojos
—A mi no me pidas perdon—
—Solo vengo a comprar unos cigarrillos—alzo las manos en señal de rendirse, Mari se fue enojada ya que no recibió ni un perdón por parte del desconocido que la había empujado hace unos minutos

—Se fue por tu culpa—
—La estabas corriendo de que te quejas—respondio el rastafari

—Como sea y de cuales llevas?—pregunto volteandose para buscar unos
—Emm de esos—apunto una caja que nisiquiera conocía
—no los alcanzo están muy arriba puedes tomarlos tu?—pregunto
—Nono tu puedes enserio damelos tengo prisa—contestó el rastafari

—Bien espera—se fue a un cuartito para buscar un palo y poder alcanzarlos.

Mientras tanto chico de rastas solo la estaba engañando el quería robar el dinero, en cuanto la chica se fue el comenzó a intentar abrir la caja fuerte y llevarse todo el dinero posible.

—No encontré..¡OYE QUE HACES!—Sorprendida por lo que estaba viendo le grito al rastafari, entendió que no quería comprar si no robar y es por eso que no quería tomar los cigarrillos el.
—Perdón no es lo que parece..yo..yo solo quería ver si tenían dinero para dejar mas—se sobaba el cuello avergonzado por ser descubierto

—Eres un mentiroso pero espera a que llegue la policía por ti—rapido tomo el teléfono que se encontraba alado de ella colgado.

Ese teléfono estaba por si pasaba algo como esto o si sucedía algún accidente en el local.

—No enserio perdón-se empezó a poner nervioso y a dar vueltas por el local
—Maldita policía jamás contestas..—murmuró
—Enserio no llames ya me voy—dijo un poco asustado
—No te voy a dejar ir—dijo la chica y de pronto el rastafari salto hacia ella
—Así te dirán tus padres cuando les pidas permiso para ir a esa tal fiesta—se burlo
—Que idiota y chismoso eres—comenzó a teclear los números de la policía.

Bajo La Mirada De Ellos /Bill kaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora