47•POR FAVOR

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Narra Claudia

Martin: Eh ¿qué? Bien ¿no?

Escupe Martin entrando en escena.

Lucas: ¿Qué pasa?

Martin: ¿La habitación cómo está? Deshecha otra vez. Entera. Todo por el suelo.

Lucas: Me olvidé.

Martin: Es que siempre te olvidas. Siempre.

Lucas: Bueno, bueno. Pero pará. Pará , boludo.

Martin: ¿Hoy concretamente que te he dicho antes de salir? Por favor recoge la habitación. Llevas una semana entera que llego de trabajar y está todo patas arriba heavy. ¿Tú lo has visto?

Lucas: Sí.

Las clases de Abril surgen mucho efecto y en esta ya se ven grandes resultados.

Martin: Hoy te he pedido en serio, por favor, que estuviera recogida porque luego vamos a tener visita. Y llego ahora ya con el poco tiempo que queda... A recogerlo yo otra vez.

Lucas: Escuchá. Yo también tengo mis cosas, boludo. Y he recogido. Hoy me olvidé porque cuando me lo dijiste no presté atención y me olvidé. Pero ahora lo recogemos entre los dos y lo hacemos rápido.

Martin: Es que nunca pasa. Osea nunca pasa.

Abril: Es culpa de Martin, Lucas. Todo es culpa de Martin.

Lucas: ¿Sabés qué pasa, boludo? Que al final vos tenés como el chip de "na, vos limpiá, limpiá, limpiá, porque yo no sé que, yo trabajo no sé cuánto" pero nunca me ayudas, boludo, tampoco.

Martin: Bueno, es que yo hago otras cosas de la casa. Esa es la sección que no me puedo ocupar yo, porque me voy pronto.

Lucas: Te vas pronto, boludo. La escusa de siempre. Al final siempre estoy acá como un boludo porque... yo también trabajo, yo también hago mis cosas. Y la limpieza no está nunca.

Abril: Que se os agote la paciencia. Habéis tragado tanta mierda que explotáis.

Martin: Lucas, no puedo. Es que no puedo más.

Lucas: A mí me rompe el huevo que venga de gritarme así de nada.

Martin: Bueno es que si no haces...

Lucas: Pero no es que no haga. Comunícate bien. Porque lo desís al aire y si estoy a otra cosa no te presto atensión.

Martin: Tú no prestas atención nunca.

Lucas: ¿Sabes que pasa? Que no te presto atensión porque me tenés las bolas llenas. Entonses me rompe los huevos ya tu vos de mierda disiendo las cosas al aire. Porque ni me mirás a los ojos.

Martin: Eso no es verdad.

Lucas: Me lo desís y te vas a la mierda. Vos siempre trayendo gente y yo como un pelotudo limpiando tu mierda.

Martin: ¿De que cojones vas?

Alza la voz y se levanta de la silla enfadado.

Lucas: ¡¿No ves como entrás y ya me venís a gritar?! Y sentáte porque me paro... me paro y... la concha de tu madre, dale, sentáte.

Martin: ¿Quieres discutir?¿De verdad?¿Quieres levantarte?

Lucas se pone en pie en una milésima de segundo encarándole.

Lucas: Me tenés ya las bolas llenas. Siempre lo mismo, boludo. Siempre lo mismo.

Martin: No haces nada, Lucas. ¡No haces nada!

OTRA VEZ•LUCAS CUROTTODonde viven las historias. Descúbrelo ahora