doce

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Jeongyeon's POV:

Mi relación falsa con Mina se mantuvo durante estos dos últimos meses. Entre este tiempo, mi familia se vio realmente interesada en mi supuesta novia, más que nada porque lo último que supieron de mí, antes de vernos en el cumpleaños de Chaeyoung, fue que yo estaba con una depresión que apenas me permitía ir a la universidad por haber terminado con mi novia. Estaban felices, Mina les agradaba; y puedo entenderlos, ella es muy encantadora en su faceta de novia falsa, en general, siempre lo ha sido. Pero yo conozco muchos más lados de ella, y muy pocas veces la había visto ser así de formal, incluso su risa no era escandalosa en cuanto se encontraba con mis parientes.

De todas formas, dejamos de lado el coqueteo, al menos por mi parte. Jamás he querido que se cree una confusión entre nosotras, y no quiero que eso pase. El solo pensar que podría perder su amistad me hace sentir mal. No puedo evitar pensar en lo atractiva que es Mina, suelo ponerme nerviosa con facilidad cuando ella coquetea conmigo, pero no quiero seguirle el juego en caso de que ella sienta cosas mucho más fuertes que yo. Sería algo que no me podría perdonar.

La saco a comer con regularidad, como una forma de pagarle todo lo que ha hecho por mí al fingir ser mi novia. No diría que es una cita, pero a los ojos de la gente que nos conoce y no sabe que lo nuestro es falso, probablemente dirían que es una.

Como hoy salí temprano de la universidad debido a la evaluación que tenía -la cual aprobé-, invité a Mina a venir a casa. Lo que fue evaluado será comido y testeado por nosotras ahora. Se ve rico, no mentiré, y como lo hice yo, sé con certeza los ingredientes que tiene y la cantidad de tiempo que estuvo en el horno; esto tiene que ser lo mejor que comeremos en la vida.

- ¿Puedo ser honesta? -Mina alza la voz, deslizando el tenedor de sus labios para saborear la crema que el postre tiene por encima. Asiento en afirmación, esperando recibir una crítica que me ayude a mejorar-. Me casaría contigo solo para comer esto todos los días.

Me río de lo que ella dice, honestamente, creí que me diría que era lo peor que había comido, incluso si yo misma lo probé y sé que no tiene un sabor desagradable.

Me aclaro la garganta, preparándome para lo próximo que debo decir. He pensado en las palabras correctas toda la mañana, pero aún así, por alguna razón, me resulta incómodo tener que charlar sobre esto con Mina.

- Deberíamos dejar de fingir una relación.

Inmediatamente veo que el rostro de Mina cambia a una expresión de seriedad que muy pocas veces he visto antes. No me mira a la cara, sino que sigue pinchando su comida con el tenedor, pero esta vez, sin llevarlo a su boca.

- ¿Por qué? Ha funcionado hasta ahora.

- Lo sé, pero no quiero seguir mintiendo ni que hayan confusiones entre nosotras.

La semana pasada, mientras Mina y yo caminábamos por el parque cercano a mi casa, su mano no se desprendió de la mía, y ella iba tan cerca de mí que era capaz de sentir cómo trataba de regular su propia respiración; cosa que es un claro signo de lo nerviosa que estaba, me solía pasar cuando mi ex y yo estábamos recién saliendo, así que sé reconocer lo que le estaba pasando. Cuando nos despedimos fuera de su casa, el beso que me dio fue en la comisura de mis labios. Y no me molesta que ella mantenga cercanía conmigo, creo que es todo lo contrario, el calor que su cuerpo desprende es agradable y me hace sentir cómoda, segura. Pero por el bien de nuestra amistad, no puedo permitir que ella siga haciéndolo, no puedo permitir que ella crea que yo estoy enamorada de ella, porque eso sería dañar en demasía a alguien a quien amo y es parte de mi corazón.

- Jeong... -guardó silencio, esta vez mirando mi rostro, quizás pensando en si era lo correcto decir lo siguiente-. Me gustas, Jeongyeon.

Claro que lo sé, siempre tuve la sospecha, desde ese primer beso que nos dimos en el cumpleaños de Chaeyoung y los coqueteos que le siguieron. Por eso hago esto, y en realidad, en este momento me arrepiento de no haberlo hecho antes. Mina es tan preciada para mí que el solo pensar en que sufrirá al ser rechazada me duele. Pero es lo correcto, mi corazón aún le pertenece a Nayeon, no he sido capaz de superarla y sé que no lo haré en bastante tiempo.

- Lo siento, Mina -murmuré, mis ojos picaban, pero no me atreví a quitar la mirada de su rostro-. No quiero herirte, sé que es inevitable porque esto va a doler...

- No lo digas, Jeong, por favor -quise abrazarla, calmar su dolor y consolarla por un rato, pero sabía que eso no era prudente al estar hablando sobre este tema.

- No quiero que pienses que jamás llegué a sentir algo... Me atraes, Mina, pero no quiero herirte, nuestros sentimientos no son los mismos y...

- Y tú sigues enamorada de Nayeon -murmuró. No lo negué, pero tampoco quise aceptarlo, ella lo sabe, no hay necesidad de que yo meta los dedos en su herida y la haga más profunda-... Puedo esperarte, Jeong, todo el tiempo que tú necesites.

- No, Mina, lo siento... Eso solo te va a hacer sufrir y yo no quiero que eso pase -le aseguré, estirando mi mano para tomar la suya. Dejé unas palmadas cariñosas sobre ella, tratando de consolar las delicadas lágrimas que caían por sus mejillas-. Es mejor que dejemos todo hasta acá y sigamos como antes... Entenderé si necesitas tu espacio por algún tiempo, pero por favor, no me alejes.

- Eres tonta si crees que me voy a alejar de ti -ambas reímos ante el insulto, pero las lágrimas eran aún visibles en sus ojos, se acumulaban con rapidez-. ¿No me vas a abrazar? Me acabas de rechazar, estoy llorando y me siento una idiota...

Rápidamente me levanto de mi asiento, rodeando la mesa y abrazando a Mina. Sus hombros se sacuden cuando la tengo en mis brazos, como si al fin pudiese soltar todo con mayor libertad. En consecuencia, eso genera que yo también suelte algunas lágrimas. Siempre he sido sensible a lo que sea que le ocurra a mis amigas, y si esto tiene que ver con que Mina ha sido herida por algo relacionado a mí, me duele incluso más.

- No quiero que te sientas mal, Jeongyeonnie, mis sentimientos venían de mucho antes -asentí, incluso si ella no me podía ver, no me veía capaz de decirle algo más. Ella se levantó de su asiento para rodearme también con sus brazos, y así ambas poder consolarnos mutuamente.

Es horrible tener que rechazar a tu mejor amiga. Mi corazón duele, y sé que el suyo duele de una peor manera.

cry for me; 2yeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora