❝𝕷𝖆 𝖕𝖊𝖑𝖎𝖓𝖊𝖌𝖗𝖆❞ ᴇɴɢʟᴏᴛ

Capítulo 3.

3 años después...

Engfa observó con entusiasmo cómo dos figuras con trajes blancos y cascos negros luchaban con una precisión increíble. Cómo la larga pero delgada hoja de sus espadas impactaba en el otro.

Cuando Engfa postuló como pasante en Austin-Corp nunca esperó pasar sus descansos los lunes y miércoles en una ventana observando a las dos personas practicando esgrima en la arena de Austin-Corp. Sabía que Austin-Corp era una empresa recién renombrada, pero no sabía cómo se llamaba antes ni su jefe porque aparentemente, el propietario de Austin-Corp, quería permanecer lo más desconocido posible. Sólo sabía que el propietario era una Omega que había trasladado su sede en Tailandia hasta, está ciudad.

Por muy fascinante que fuera ver el combate en sí, Engfa no le prestó mucha atención, sino que estaba más cautivada por la mujer de cabello marrón. Engfa se decepcionaba un poco cada vez que la mujer de cabello castaño se quitaba el casco y no dejaba al descubierto la suave piel de alabastro con las mejillas sonrojadas, una cola de caballo desordenada y los penetrantes ojos avellanas que esperaba. Los ojos de la mujer eran bastante similares, pero no el mismo tono de marrón que perseguía a Engfa casi todas las noches en sus sueños, a veces incluso durante el día. Como ahora mismo.

"¿Me estás escuchando siquiera P'Fa? ¿Hola Engfa? Tierra. A. ¿Engfa?"

Engfa sacudió la cabeza para salir de su ensoñación. "Sí, lo siento, Snack. ¿Qué pasa?"

Snack era una buena Beta. Siempre educada y servicial, también era pasante pero trabajaba como recepcionista.

"En serio, Engfa, debes dejar de soñar despierta con esa mujer misteriosa con la que siempre estás soñando despierta". Respondió Snack, sacudiendo la cabeza. "De todos modos, como decía", continuó, "alguien nuevo nos supervisará hoy. No conozco los detalles, pero aparentemente ella es muy rigurosa pero también le gusta estar súper sexy y esas cosas, pero Nessa me dijo que desprecia a los Alfas que intentan tocarla". Snack explicó con una expresión de preocupación en su rostro.

"Yo nunca" Engfa respondió a medias, su mente ya volviendo a Charlotte, o a la mujer misteriosa, como Snack se había referido a ella antes. Han pasado tres años y Engfa todavía no podía dejar de pensar en ella.

La hora del almuerzo terminó demasiado rápido para el gusto de Engfa. Una mujer llamada Nessa, amiga de Snack, pidió a los pasantes que entraran a la oficina y se pusieran en fila horizontal. Un interno se burló mientras caminaban hacia la oficina y susurró para sí mismo qué es esto, militar .

Haciendo fila, los pasantes esperaban al nuevo supervisor. La puerta se abrió y la mujer de antes, Nessa, entró de nuevo, pero esta vez con una mujer de piel de alabastro y cabello castaño oscuro y al teléfono. La llamada telefónica terminó tan pronto como la mujer llegó a su escritorio y hundió la nariz en el papeleo. El corazón de Engfa cayó hasta su entrepierna y volvió a subir. Su nueva supervisora no era otra que Charlotte Austin. Su nueva jefa, Charlotte Austin.

La habitación estaba en silencio, pero se oía un leve sonido de masticación. Después de un rato, Charlotte se levantó con una carpeta en la mano y avanzó elegantemente hacia los pasantes. Se cruzó de brazos y levantó una ceja perfectamente depilada hacia el interno cuya masticación era el único sonido audible en la habitación. Aunque Engfa estaba segura de que los rápidos latidos de su corazón eran aún más fuertes.

"Masticando chicle, Alfa. Ya no estamos en la escuela secundaria". Ordenó Charlotte, mirando al interno. El interno corrió al baño para escupir el chicle. Charlotte continuó con su mirada crítica. Sus vibrantes ojos avellana se detuvieron unos segundos más en Engfa hasta que avanzaron más.