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Orrrdeeennnn ordennn, grito Nie Mingjue, juez del caso Wei Wuxian, señores Zhao, ustedes ya han tenido su desquite, apalearon al chico sin ninguna resistencia de parte de él concilio, el doncel pago con su cuerpo el daño a su amada hija, fue despojado de su lengua y será vendido a la casa de madam Wu para terminar sus días en ese lugar, creo que es suficiente, replicó el hombre mirando a los escandalosos con sus ojos de pistola cargada.
Los Zhao se callaron al instante no eran tontos, sabían que Mingjue era un juez duro pero justo, así que tendrían que esperar su turno para el alegato y así quizás lograrían algo más que lo que ya habían tomado, Wangji oyó todo lo que le hicieron a su dulce Ying, por que no lo encontró antes, dioooss como es que el destino lo había tratado tan mal, entonces ahora solo quedaba una posible solución, pensó el joven desde su palco.
Después de horas y horas de alegatos de los Zhao, los Wen y el silencio de los Jiang y los Lan, Nie Mingjue ya cansado de no llegar a ninguna situación aceptable para ambas partes soltó una última oferta, hay alguien en esta sala, que pague la indemnización de la dama Zhao Lushi, le de la oportunidad de ser una esposa por lo menos por un lapso de cinco años, para que los Zhao estén satisfechos, grito el juez a la concurrencia.
Por fin silencio en la sala, la indemnización que pedía la familia de la chica era bastante jugosa, además quien querría casarse con esa chica en esas condiciones pues además de la herida en su cara la niña ya no era la misma de antes, pues su trauma la llevó a perder parte de su cordura.
Xiaoling pidió más te y galletas, deberían de darles a ese costal de huesos a los Zhao de una buena vez, de todas maneras no creo que ese pobre despojo de ser humano sirva para algo después de todo lo que ya hicieron con el, madre quieres dejar de ser tan desagradable estamos tomando te lo hechas a perder con tus asquerosidades, replicaba Xichen al ver que su madre no se callaria pues su padre no le decia nada.
Wuxian sabía que nadie pagaría por el, tampoco habría alguien tan loco para llevar a dos despojos de personas a su casa, pues al pagar la indemnización del crimen del doncel, el auspiciador tenía automáticamente la custodia del delincuente, en este caso el.
Mingjue suspiro cansado, era momento de dar su brazo a torcer, tendría que hacer eso que no quería hacer, hubiera preferido que el joven sirviente hubiera muerto en la celda por las complicaciones de sus heridas que entregarselos a los Zhao pero ahora ya no había otra solución más que ceder a su petición.
Apenas iba a dar su último veredicto, los Zhao se sentían victoriosos, cuando en el palco de los Lan una figura masculina y poderosa se puso de pie, yo pagaré la indemnización, yo me casaré con la señorita Zhao Lushi y yo castigaré adecuadamente al prisionero Wei Wuxian.
Xiaoling se desmayó en su asiento derramando la tasa de te que tenía en sus manos sobre ella misma, Jingyi corrió a ayudar a su padre con la mujer, Xichen se levantó de asiento tranquilamente para pedir un médico y Wangji bajo del palco para firmar los documentos que le acreditan como dueño del destino de ese sirviente, como prometido y futuro esposo de la chica mancillada y como el nuevo yerno del señor Zhao Yangxin.
