perdida

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Mienstras corrias por la calle iluminada sin mirar atrás te diste cuenta que había una gran colina que no habías visto antes, la subiste y ya estabas exhausta, seguiste caminando por un buen rato hasta que viste un parque un tanto pequeño pero bueno, te sentaste en un columpio y habías reaccionado en algo... Estabas perdida, y luego te pusistes replantar todo lo que había sucedido en unas horas, primero no tenías dinero, no sabias donde estabas, como no habias comido tenias hambre y no tenias comida, no tenias con que defenderte si pasaba algo, y todo pasó por no querer aguantar una regañina, mienstras mirabas al suelo poco a poco te hibas enojando, primero no era tu culpa, Valeria era la que te había descuidado y por eso tu habías  echo eso, luego vino con otra mujer a tu casa y ni siquiera sabías si era su trabajadora o algo por el estilo y por último ella nunca te enseño a defenderte, o bueno esas eran las ideas que estaban en tu cabeza en ese momento

Después de 15 minutos

Habia pasado ya bastante tiempo, cómo no tenías reloj ya que dejaste todas las joyas en la mansión incluyendo tu reloj no sabías que hora era pero sabías que ya era tarde pues ya no había nadie en el parque y ya estaba haciendo frio, y tú abrigo no te estaba calentando lo suficiente, no sabias que hacer, no sabias el camino a casa y ya te habias frustrado, lo unico que salio de ti fue un

Tu: maldita sea... Todo es tu culpa Valeria, si no me hubieras abandonado no estaría aquí....

En tu mente Valeria era la culpable de todo pues si ella no te hubiera dejado de ver y hablar no hubieras echo eso, decidiste pararte e ir a caminar para calentar tu cuerpo, mientras caminaba por las calles desoladas de las "almas" te diste cuenta de que todos los lugares ya estaban cerrados y los que estaban abiertos se tenia que pagar para entrar, no tenías a nadie, hasta que sentiste una mano jalarte fuertemente

Tu: soltaste un pequeño grito ahogado antes de darte la vuelta y decir Q-quien eres?

Dijiste en una voz temblorosa

X: gefasita soy yo, no me diga que ya se olvidó de mi

Después de escuchar la voz de aquel hombre te diste cuenta de que era Maikel, uno de los tantos trabajadores de Valeria

Tu: si me acuerdo de ti, Maikel, ¿verdad?

Dijiste de una manera segura y tranquila

Maikel: precisamente gefasita, y usted qué hace por aquí? Esta zona es más peligrosa y por lo que tengo entendido la patrona no la hubiera dejado salir y menos a estas horas y sin seguridad

Tu: digamos que me escape y nosé dónde estoy, tengo hambre, no tengo dinero y no tengo mi celular para llamar a Valeria

Maikel: cómo así gefesita? Osea se escapó? Y pues ya no hay lugares abiertos, y no se me preocupe yo ya le llamo a la patrona para informarle y que se la lleve a la casa

Tu: gracias Maikel me salvaste, y dos preguntas, cómo sabes que estaba perdida?, y que haces por aquí si es peligroso?

Maikel: bueno mire gefesita yo me quería divertir un rato y pues bueno vine a un bar, pero ví una figura que se me hizo bastante conocida y luego la Vi bien, y bueno si la dejo sola y la patrona se entera que yo la Vi y no la ayude me mata

Tu: aaa con razón, bueno pero si márcale que ya tengo frío y hambre

Maikel: como digas gefesita

esposa de Valeria Donde viven las historias. Descúbrelo ahora