13. Nuestro primer día

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Viana.

-Kayla...Kayla- la llamo- Kayla, Kayla- esta vez puse más insistencia, pero está como un tronco.

-Aynngrbdgrtsab- murmura ella en sueños. Ayer fue más fácil...

-Kayla- nada, que no contesta. No soy alguien que haya sido dotada con ese fantástico don llamado PACIENCIA.

Corro al interior de la cocina y poco después salgo con un vaso de agua fría y cubitos de hielo.

-Kayla- le digo, creo que mejor le tapo la boca por si grita. Ahora le tiro el vaso de agua sobre la cara.

- ¡¡¡MMMMM!!!- pobre Kayla, el agua de verdad está helada.

-No grites tanto, que te van a oír- la reprendo.

Enseguida se calla y sonríe con malicia, me da la sensación de que sabe lo que le voy a proponer.

-Se me ocurrió una idea- le digo apartando mi mano de su boca.

-Primero, toma- dice dándome un coscorrón- ya me vengaré como es debido.

-Que tonta te pones ¡si no hubiese hecho eso no te hubieras despertado!- le rebato mientras me froto en la zona del golpe. Duele.

-Segundo- continúa - ¿Qué broma propones?- Guoh ¿visteis? Sí sabía que le iba a proponer alguna broma.

-Pues... es ir por la casa, coger todo lo que encontremos, con todo lo que encontremos me refiero a rotuladores, nata, chocolate...

-Cuidado con el chocolate, si lo huelen las hermanas Arendelle estaremos jodidas- me advierte ella.

-Sí, dios mío. Esas chicas tienen un problema serio- le digo un poco en broma, pero sólo un poco.

-Sí... bueno, ya te entendí. ¿Vamos?

-Claro- gracias a la Luna, somos las más cercanas a la puerta.

Entramos a la cocina y cogemos de todo: nata montada, helado, miel, rotulador negro, pintalabios de Elsa, tarta, caramelo (el poco que sobró después de que Kayla se comiera la mayoría) y muchas cosas más....

Volvemos en silencio al patio y les dibujamos divertidos bigotes de colores. A los chicos les pintamos los labios de rojo y a las chicas les dibujamos puntos de colores (los rotuladores no son permanentes, pero cuesta quitar la tinta). A Jack, Kayla decide no tocarle el pelo y ponerle nata en la mano, cuando despierte y se toque la cara va a sufrir. Le unta un poco de caramelo en los cachetes y le espolvorea trocitos de chocolate, haciendo que parezcan pecas. Le pinta los labios de rojo carmin y con rotulador violeta le hace "zarcillos" en las orejas. También le pone rímel y le dibuja entrecejo. Pobre chaval, más feo imposible..o sí es posible? Déjame hacerle algo a Kid a ver que sale... Me dirigo hacia Kid y lo miro pensativa. ¡Ya sé! Cojo el chocolate y lo derrito en el microondas, luego se lo esparzo por toda la cara, exceptuando los ojos y la boca. También le pinto los labios y los ojos. Y de ultimo con un poco de nata le pongo una bolita en cada mejilla.

-Ahora les sacamos unas fotos y las guardamos de recuerdo. Perfecto.

Tras hacer esto, nos tumbamos en el césped, la una al lado de la otra. Un poco alejadas del grupo para prevenir cualquier ataque. Tras esto Kayla me da un beso en la mejilla y vuelve a agradecer la fiesta, cabrona ¿Cómo sabe que se me ocurrió a mi? Cierra los ojos y me dice que se va a dormir, yo también me estoy quedando, poco a poco, dormida...

Narrador

La mañana de Lunes se presenta perfecta. Una cálida luz acaricia sus rostros pringosos, la suave brisa hace que se les seque mas el pegote que tienen encima,... las hormigas están a punto de darse un festín con alguno.......bueno, al final no es una mañana tan perfecta.

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