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Amaya estaba acostumbrándose a tener a su nuevo roomie rondando por su casa

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Amaya estaba acostumbrándose a tener a su nuevo roomie rondando por su casa.
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Un día llegó de trabajar y vio al morocho sentado jugando con su consola quien al verle pauso su juego y dijo
—¿Cómo te fue?—pregunto apenas la vio llegar—
—bien—contesto y dejo sus cosas en el comedor, se pondría a terminar sus pendientes
—¿Te molesta si sigo jugando aquí?—pregunto el morocho —
—claro que no, tu llegaste primero —contesto y volvió la vista a lo suyo intentado concentrarse

Fue imposible, las risas del morocho y las luces la invitaban a verlo jugar y eso paso durante varios días y esto no fue pasado de desapercibido por el morocho quien la invitó a jugar finalmente
—¿Quieres jugar?—pregunto y la pelirroja negó —
—debo terminar esto, se supone que lo debí terminar hoy —el morocho se acercó a ver qué era
—ya te falta muy poco, unos cinco minutos que juegues no le hará daño a nadie—dijo y dejo el control en las manos de chica—
—No lo se
—Te prometo que no vamos a tardar nada, cinco minutos —dijo y la pelirroja asintió no muy convencida pero igual acepto
—pero yo no sé jugar —contesto la pelirroja
—Yo te enseñó, picale a la b —dijo y la pelirroja obedeció, esos cinco minutos se convirtió en quince, luego en veinte para finalmente completar la hora —
—dios, debí terminar eso hace horas —exclamo la pelirroja y le devolvió el control al morocho
—Pero no me vas a negar que te divertiste —le dijo y la pelirroja sonrió, se había divertido, sentía su mente más despejada y algo descansada de tanto trabajo
—supongo que necesitaba un descanso, el lado positivo es que me faltaba literalmente poco —dijo y el morocho le sonrió —
—Te ayudó, ¿Que tan difícil es calificar libretas?—se le levantó y fue con la pelirroja
—Te dirira que no, pero siento que no te importaría
—Nos empezamos a conocer, eso es bueno —dijo y tomo una pluma del escritorio
—Alison said my dog is ugly—leyo y luego leyó lo que se supone debía ser la traducción —
—Chale y le voy a confiar mi futuro a estos weyes —dijo y empezó a calificar —
—es ingles—dijo la pelirroja riendo —-
—estos son de historia ¿También das historia?
—la pelirroja asintió —
—No mames, que chido—dijo y empezó a ojear la libreta —  maestra Amaya Martinez Giménez —leyo el nombre y volteó a ver a la pelirroja —
—¿Que?—pregunto y el morocho solo soltó una risita
—Nada, tu nombre es muy lindo —dijo y siguió viendo la libreta —¡No mames! ¿Sabías que la persona que dió el grito de la independencia en 1810 fue Benito Juárez?—pregunto con sarcasmo la pelirroja solo soltó una risa —
—¿No había sido Miguel Hidalgo? —pregunto y el morocho asintió entre risas —
—¿Que pedo con tus alumnos? — dijo y siguió calificando aunque luego se noto que trabataba de recordar cosas
—en que barcos llegó colon?—pregunto tratando de recordar —
—No mames, ¿Es neta?—pregunto burlesca la pelirroja —
—es que no me acuerdo cuáles, es la pinta la santa maria— dijo forzando a su cerebro a recordarlo —
—La niña, es la pinta, la niña y la santa maria—dijo la pelirroja —
—neta, ni me acordaba que bueno es vivir con una maestra de historia —
—voy a hacerte un examen —dijo la pelirroja y el morocho le vio algo preocupado —
—No será de inglés ¿verdad?—la pelirroja rió y negó —

𝗥•𝗢•𝗢•𝗠•𝗜•𝗘 ||𝐀𝐋𝐃𝐎𝐆𝐄𝐎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora