Príncipe idiota
No sé cómo llegue a esto, bueno si, por mi boca imprudente, pero me gusta de cierto modo, el arma que me fue dada no se siente pesada para nada, algo que hace que todos se sorprendan por ver que no me inmute para nada al agarrarla, la muevo para observarla mejor, es una espada bastante agradable.
— ¿Quién quiere pelear con la humana? — ¿qué? No! ¡Demonios! el príncipe mira a los guardias, uno de ellos alza la mano, un castaño, pero no es pálido, no parece vampiro, mientras sigue caminando para salir del montón, sigo intentando verle la cara, gran error.
Mi ánimo cambia completamente al tenerlo cerca, jamás pensé volver a verlo y no tenía en la cabeza que él fuera el infiltrado en este reino.
Vaya cosas ocultas tienes Elena.
Nuestras miradas se encuentran y me sonríe de lado, Asher, mi ex compañero y mi ex novio, empezamos mal. Bastante mal.
Crecimos juntos con Marlon, fuimos realmente buenos amigos, una bonita amistad en donde nos apoyábamos entre todos, los tres éramos prácticamente el ruido y desastre de la casa donde vivíamos, practicábamos juntos la espada, defensa personal, arquería, pero él siempre fue mejor.
Sobresalía en todo, y mientras más fue creciendo se volvía alguien muy apuesto, con su cabello castaño claro llamativo y esos hermosos ojos cafés, al crecer a su lado no pude evitar enamorarme, aunque realmente no fue un enamoramiento sino alguien que quise demasiado.
Todo este noviazgo inicio en una de esas noches en las que salíamos a escondidas para pasear por el bosque, él me pidió ser su novia, yo emocionada por qué en ese tiempo era todo lo que quería acepte, todo fue bonito, duramos 3 años juntos, hasta que él se tuvo que ir a esta misión de infiltración. Me mandó una carta diciéndome que ya nada sería igual y terminamos.
Todo quedo en el pasado, ya que nunca más lo volví a ver. Bueno hasta ahora.
—Un humano con humano, me parece justo — dice el pálido superior, que solo hace que ponga los ojos en blanco.
—Siempre tan educada— Asher se pone a mi lado susurrándome, lo ignoro completamente.
—Bien, empecemos, colóquense en cada lado de la arena, esto lo disfrutaré. — suelta uno de los tantos guardias.
Asher me mira divertido, como si disfrutara la situación.
— ¿Empezamos? — me dice y yo solo lo miro furiosa por qué sé que se burla de mí, él en pasado como dije era el mejor de todos en nuestro grupo de cazadores, mejor que yo, ahora no dudo que haya mejorado esas habilidades, sabiendo ahora que aquí los entrenamientos son más exigentes.
— Vamos. — el príncipe mira, me detalla. — Demuestra lo que sabes humana, a no ser que quieras se comida. — eso parece poner a Asher alerta.
Pero no puedo hacerlo, no tengo que pelear con nadie. Significaría llamar mucho la atención, aunque quiera mostrarle a Asher y al tarado superior del príncipe pálido que he mejorado y que ya no soy esa chica de 17 años que dejo, no puedo.
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La cazadora del príncipe
Viễn tưởngPara alguien que odia a los vampiros trabajar para ellos es una tortura.