¿Aun me amas?

♡Cap 6

Los días pasaron y Kid Flash siguió con la misma táctica, dándole cosas a Robin quien parecía poco a poco enamorarse de esa persona misteriosa que lo dejaba lleno de regalos todos los días, claro que Kid Flash ya no los dejaba en su habitación, sería sospechoso. Los regalos eran entregados por correo todos los regalos como flor, chocolates, peluche o poemas fue recibido con un gran amor y emoción de parte de Robin, aumentando la confianza de Kid Flash.

Robin empezó a pensar en alguien que le enviaría todo esto. No podría ser alguien de su equipo. Después de todo, nunca hicieron nada bueno por él a menos que fuera para burlarse, y él tampoco sabía nada de esa persona. Intentó buscar algún rastro que pudiera darle alguna pista. Insinuación de quién podría ser pero todo estaba muy planeado ya que no había nada de nada, lo único que quedaba era imaginar cómo sería aquel o aquella.

Uno de esos días Robin recibió algo... diferente era un poema que no solo decía que era alguien muy lindo sino que también lo invitaba a una...

-¡Cita! ¡Quiere verme!-

Robin sintió una gran emoción al leer que por fin conocería a esa persona que lo hacía sentir tan lindo y amado pero con esa emoción vino junto con los nervios.

-Oh, no se que usar, no sé qué le gusta y si me pongo algo ridiculo o digo algo raro-

Con Wally

Wally estaba totalmente nervioso, sentía que se había apresurado, no sabía qué ponerse.

-Qué color es más elegante- Dijo mientras miraba los dos únicos trajes que se había comprado -¿Rojo o negro? ¿Debería traer más flores o más chocolates? ¿¡o ambos!?-

El pelirrojo estaba totalmente dudoso. ¿Y si llegaba tarde? ¿Qué pasa si Robin se decepciona y se va cuando lo vea? ¿Qué pasa si accidentalmente dice algo inapropiado? Miles de cosas podrían pasar en esa cita, tenía que tener todo planeado y no es alguien que le guste pensar mucho o planear algo simplemente no era lo suyo.

-El tío Barry ha tenido muchas citas, estoy seguro de que sabrá qué hacer-

Wally acudió con su tío con la esperanza de tener las respuestas a sus preguntas, pero le daba un poco de vergüenza pedirle un consejo.

-Hola tío- Dijo Wally algo apenado.

-Hola campeón, ¿qué pasa?- Barry dejó lo que estaba haciendo y miró a su sobrino -¿Estás bien? ¿El ratón te comió la lengua?-

-Es que yo… invité a alguien a una cita y no sé qué decir ni qué ponerse, es alguien elegante y delicado y creo que me odia- Wally suspiró luego de decir eso ya que había dicho muy rápido -Y quería pedirte consejo-

Barry se agachó a la altura de su sobrino y pensó un momento antes de hablar.

-Se tu mismo-

-¿Qué?-

-Sé tú mismo a la gente le gusta que seas seguro y confiado, sé un Allen-

-No me apellido Allen-

-Oh cierto… Se un West entonces-

-¿Y eso qué se supone que significa?-

-Lo descubrirás ahora regresa a tu habitación que estoy cocinando-

-Pero...-

-Sin peros, vuelve a tu habitación-

Barry empujó a Wally fuera de la cocina y regresó resignado a su habitación.

-Ser un West eso no tiene sentido además a Robin no le gusta quien soy digo mírame-

Wally se vio en un espejo de cuerpo entero, era atractivo físicamente pero por lo demás era muy… inmaduro, tonto, torpe, inadaptado, antipático, molesto, fastidioso, etc. Prácticamente tenía todo para hacer que Robin lo odiara.

-Solo desearía ser el chico que Robin quiere, solo cumplo con su estándar físico, el cual no sea tan difícil de lograr o superar-

Wally se sentó en su cama y empezó a pensar en ¿qué diría Robin? Para intentar entender lo que tenía que hacer hasta que se le ocurrió una idea.

-¡Cómo no se me ocurrió! Voy a ser totalmente directo, sin indirectas, sin chistes ni bromas, será fácil-

Mientras tanto con Robin

El pelinegro continuó arreglándose, no sabía qué regalo traer, así que solo debía lucir lo mejor que pudiera para poder complacer a su cita.

-He tenido muchas citas con Star, esto no es gran cosa, solo es alguien que no conoces que posiblemente es muy lindo y busca algo serio-

Robin comenzó a sonrojarse de solo pensar en cómo sería tener una relación con alguien tan amable como esa persona que se imaginaba dándose regalos estando ahí el uno para el otro teniendo cosas más íntimas como tal vez dormir juntos viendo películas entre otras cosas.

-Solo espero que no me deje plantado como en la última cita a ciegas que tuve-

Ambos chicos intentaron pasar el día como si nada hubiera pasado, aunque no podían dejar de pensar en la cita y lo que sucedería durante la misma, Robin esperando que cumpliera al menos lo que imaginaba y Kid Flash preparándose para no arruinarlo todo.

El día pasó extremadamente lento para ambos hasta que finalmente llegó el momento de verse.

Kid Flash se preparó lo mejor que pudo mientras Robin, bueno, él sí sabía cómo prepararse. Para buena suerte de Robin, a los titanes no les importaba en lo más mínimo hacia dónde iba, por lo que no tuvo muchos problemas para irse.

Robin llegó mucho antes que Kid Flash y se sentó a esperar. Estaba muy ansioso y feliz, pero sobre todo estaba ansioso, mirando su celular y pensando en algún tema de conversación.

Kid Flash estaba afuera observando a Robin a punto de dejarlo plantado por el miedo que sentía cada vez que estaba cerca de él, tenía la necesidad de molestarlo. No quería arruinarlo, pero si no iba, Robin dejaría de confiar en ese chico que lo colmaba de regalos.

-Esta bien... estoy listo...-