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Chaeyoung acostó con mucha delicadeza a Haewon sobre la cama decidiendo que sería mejor no colocarle su pijama y solo quitarle los zapatos junto a los calcetines, abrigarla con su manta, encender la lámpara de noche, darle un beso sobre su frente y salir de la habitación con los nervios adueñandose de cada fibra de su cuerpo y con su corazón inundado de una tristeza profunda que hacía aguar sus ojos.

Y es que como no sentirse así, si tenía a la alfa que más había amado en su casa, en la misma casa en la que su cachorra creció, en la que dijo sus primeras palabras y dió sus primeros pasos, la misma casa en la que había atesorado tantos recuerdos con su cachorra, la misma casa en la que ella había llorado tantas noches por no sentirse suficiente y ahora tenía a la dueña de su sufrimiento a tan solo unos cuantos de ella, seguramente esperandola para hablar de cosas que la Omega por el momento no quería escuchar.

¡Diosa luna! ¿Por que tenía que ser todo tan complicado?

¿Por que Mina tenía que aparecer ahora? ¿Por que no se había quedado en Japón? ¿Por que después de tanto tiempo viene a robarle la poca calma que había logrado sentir?

Así fue como soltando un lento suspiró de sus labios la Omega limpio con la yema de los dedos las lágrimas que mojaron sus mejillas animandose a retomar su andar por el pequeño pasillo, bajar las escaleras y llegar hasta la sala, encontrándose con Mina sentada sobre el sofá mirando una fotografía que tenía en sus manos.

- Mina - susurró Chaeyoung terminando de avanzar los pocos pasos que la separaban, pudiendo ver con claridad como el cuerpo de la alfa temblaba mientras sus ojos estaban bañados en lágrimas con sus mejillas sonrojadas y sus labios fuertemente aprisionados entre sus dientes

- ¿Co- Como fue? - inquirió Mina acariciando  la fotografía con su pulgar tomándose unos segundos para admirar el pequeño rostro de Haewon antes de posar toda su atención frente a la Omega que estaba sentada sobre la alfombra, mirándola con sus grandes ojos llenos de confusión

- ¿Eh?

- el embarazo, cuéntame todo por favor, y Y-yo quiero saber cómo te sentiste, si tuviste muchas náuseas o antojos...

- Mina

- ¿Quien te acompaño en el parto?

- ¡Hey! - exclamó Chaeyoung apoyando su mano sobre la rodilla de la alfa, apretando con sus dedos su carne haciendo que Mina dejará la fotografía sobre el sofá y posará sus manos sobre su rostro mientras rompía fuertemente en llanto

- por favor dime....

- está bien - murmuró Chaeyoung soltando un poco de su aroma, justo como hacía con su cachorra cuando no podía conseguir que dejara de llorar - te contaré todo lo que quieras, solo si te calmas ¿Si? - asintiendo con su cabeza como respuesta la alfa cerro sus ojos y respiro profundo un par de veces hasta lograr tranquilizarse y así poder volver a enfrentar a Chaeyoung - ¿Mejor?

- si - respondió con un hilo de voz, sintiendo como una punzada de dolor atravesaba su cabeza sacándole un leve quejido de sus labios

- ¿Que pasa? ¿Te sientes mal?

- no, solo es un pequeño dolor de cabeza.

- si mi memoria no me falla, tus dolores de cabeza no son para nada pequeños, así que espérame aquí, iré por una pastilla, una manta y una almohada porque dormirás aquí

- ¿Que?

- no permitiré que te vayas así, puede ser peligroso para ti - sentenció Chaeyoung colocándose de pie bajo la atenta mirada de la alfa que solo negó con su cabeza y se terminó de recostar por completo en el respaldar del sofa - y no aceptaré ninguna negativa de tu parte Myoui Mina.

- no tienes porqué hacer esto, mi chófer puede venir por mí y llevarme al hotel

- te quedarás aquí y no está a discusión, mejor ve quitandote los zapatos mientras yo voy por todo para ti

- Chae..

- quieres que te cuente todo sobre mi embarazo ¿Si o no?

- si - respondió rápidamente la alfa en tanto su llanto cesaba y le daba paso a una pequeña chispa de emoción que se apoderaron del iris de sus ojos haciéndola ver demasiado bonita ante los ojos de la Omega

- entonces, quédate esta noche conmigo.

- yo me quedaría contigo todas las noches que me pidieras.

- no de esa forma, Mina, solo cállate y espérame aquí - murmuró con sus mofletes pintados con un tono bermellón antes de girar su cuerpo y caminar directamente a su habitación en tanto se regañaba mentalmente por las palabras que había utilizado.

***

Mi Omega

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Mi Omega

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⏰ Última actualización: Mar 22 ⏰

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