Desamparada (parte 2)

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Con los ojos perdidos en el vacío, sin control sobre su cuerpo, con un millón de preguntas en su mente y con un niño de 7 años en sus brazos.

Lili corrió hacia el bosque hasta que quedó sin energía ni aire en sus pulmones, corrió hasta que sus piernas se detuvieron, escapó de aquel lugar que la vio crecer hasta desplomarse en el suelo de una cueva, donde ni los rayos ni la lluvia podían afectarla a ella ni a Nikolái.

Niko: Quiero ver a mi abuelita...

Lili no prestó atención a las palabras de Niko, simplemente se quedó callada con la mirada perdida mientras las lágrimas caían de sus ojos al suelo...

Lili volteó a ver a Niko, quien seguía repitiendo lo mismo una y otra vez.

Con la voz entrecortada y lágrimas recorriendo sus mejillas, trató de consolar a Niko.

Lili: ... lo siento, Niko... pero no podrás volver a verla... lo siento... de verdad...

Niko: ¡No puedes dejar a mi abuelita allí! ¡No puedes, ella te ayudó! ¿Por qué tú no quieres ayudarla a ella, Lili? ¡¿Por qué no?!

Gritó Niko con una voz tan dulce y sincera, diciendo palabras tan tristes y desgarradoras para Lili. Con un gran nudo en la garganta, se las arregló para pronunciar unas cuantas palabras...

Lili: ... no podemos ir, Niko, entiende que no podemos regresar. ¡Nunca podremos volver!...

En ese momento, se hizo presente un silencio tan triste como incómodo. Lili abrazó a Niko, quien estaba llorando y tenía frío. Ambos se cobijaron con ropa que Lili había guardado en su mochila antes de irse y durmieron entre lágrimas...

Esa noche, Lili soñó con los sujetos que habían atacado su aldea, uno de ellos agarraba a Nikolái mientras que otros dos la sujetaban a ella, dejándola sin poder hacer nada más que mirar cómo asesinaban a la última persona que conocía...

Al día siguiente:

Niko: Lili... tengo hambre...

Al mirar a Niko, Lili lo abrazó...

Lili: Nunca dejaré que nadie te haga daño, Niko. Te lo prometo.

Mencionó Lili mientras lloraba silenciosamente...

Pasó el tiempo y ambos crecieron. Ahora Niko tenía 9 años y Lili 18.

Ambos habían formado un gran lazo entre si, Lili le había enseñado a Niko a cazar y pescar, iban a pescar a un río cercano cada vez que tenían hambre.

Niko aparentemente ya se había olvidado de lo que había ocurrido en el pueblo, pero por otro lado Lili nunca podría olvidar los sucesos de aquel fatídico día.

Siempre estaba preparada por si acaso algo similar volvía a ocurrir. Siempre se entrenaba golpeando un árbol, hasta que sangraban sus nudillos.

Un día, Niko se encontraba muy enfermo, Lili se mantuvo dándole de comer durante 3 días, estaba a poco de acabar su enfermedad.

Lili estaba emocionada por ello, otra vez podrían volver a pescar juntos después de esos largos 3 días. entonces Lili volvió a ir a casar, mas cuando volvía hacia su refugio, se tropezó con una roca. y al caer se dio cuenta de algo que la hizo temblar.

Lili:..... huellas?....

(no.. no.. ¡no!.. es demasiado temprano.. aun no estoy preparada!.) 

pensaba Lili mientras corría a toda velocidad fue entonces que lo miro, horrorizada. observo como Niko estaba siendo atravesado por una lanza, de el mismo negro mate que el que portaban aquellos sujetos que habían convertido su hermoso pueblo a nada mas que cenizas.

Lili: N-Niko. . . no.. ¡NO! ¡NIKO!

Con odio, furia y lagrimas en sus ojos.

salió de los arbustos.

mas sin embargo fue sometida por alguien que estaba detrás de ella, con un movimiento tan ágil y veloz aquel sujeto la puso en el suelo y la noqueo casi instantáneamente, lo ultimo que Lili pudo ver antes de que su conciencia se difuminara, fue la silueta de un hombre. . . un hombre de cabello rojo y armadura plateada. .


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⏰ Última actualización: Mar 20, 2024 ⏰

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