Serendipia

Capítulo 0

Para algunas personas empezar de cero sonará aterrador y para otras tentador pero para mi no era ninguna de las dos, ahora mismo me siento en modo avión y es que literalmente estoy en modo avión, bueno al menos mi móvil. De cierta manera si que me alegro de emigrar a otro país y poder rehacer mi vida. Quiero decir, no es que mi vida esté mal o me haya pasado algo tremendamente malo como para querer irme pero intento ver el lado positivo. En mis primeros años de adolescencia me hicieron la vida imposible me hacían burla, bromas pesadas y en el peor de los casos me llegaron a amenazar de muerte.
Se metian conmigo por mi peso, mi pelo rizado, mi acné y como no con mis brackets y con cualquier mínima cosa que vieran para hacerme el día imposible. Pero lo que más me dolía era que se metieran con mi cuerpo, mi cuerpo siempre fue grueso más no gordo pero gracias a esos comentarios caí en un TCA cosa que no le deseo ni a mi peor enemigo. Gracias a dios a dia de hoy estoy totalmente recuperada, mental y físicamente aunque siempre existe un miedo por volver a recaer.

Dejando a un lado mis problemas y malas experiencias, de una u otra manera estoi feliz ahora mismo. A mis padres les han ofrecido un mejor salario y mejores horarios en un hospital de Caracas, mis padres trabajan en el mismo sector, ellos son cirujanos, concretamente mi padre es neocirujano y mi madre cirujana general.
Me da pena irme de mi ciudad el lugar que me vio creer, mi querida tierra, Madrid. Muchas veces pensé que jamás me iría a vivir a otro lugar jamás se me pasó por la mente, siempre dije de Madrid al cielo pero por lo que veo no es así.

—Queridos pasajeros, abrochense los cinturones el avión está a punto de aterrizar

Todos hicimos lo que nos dijeron y en un abrir y cerrar de ojos

—Queridos pasajeros, bienvenidos a Caracas disfruten de sus estancia

Un taxi nos trajo hasta la nueva casa, en cuanto llege entre en mi nueva habitación y coloque todas mis cosas para hacerla más acogedora y más mía. La habitación era muy grande tenía una enorme ventana la cual tenía una hermosa terraza, esta daba vistas a la otra vivienda de al lado pero se podía ver vastate despejado. Hacia demasiado calor y estaba muy cansada, a lo que me di una baño relajante y en cuanto salí me coloque el pijama y hice lo que más me gusta en el mundo, perderme entre letras.

—Shantal, Natasha te está llamando y no sé lo coges

—¿Si? Ahora la llamo yo, gracias mamá

—De nada amor, en nada estará la cena lista

Mi madre salió de mi habitación y cogí mi teléfono para llamar a mi hermana mayor Natasha, ella tiene veinticinco años y vive sola en un hermosos departamento en plena puerta del sol de Madrid.

—Ya era hora de que me lo cogieras ¿no?

—Perdón pero ya sabes que cuando leeo pongo el móvil el silencio

—Y tu ya sabes que me da mucha rabia que hagas eso pero bueno, ¿que tal habéis llegado?

—Bien, candados pero bien.

—¿Te puedo pedir algo?

—Claro

—Cuidate mucho, no dejes que nadie te pise ni te haga sentían que eres menos, se tu misma ve con la cabeza en alto pero nunca pierdas la humildad ¿si? Y por favor cuidamucho de la enana —enana es como llama Natasha a nuestra hermana pequeña Elora, una pequeña terremoto de 7 años— Cuidaros mucho, yo iré lo antes posible a visitaros

—Te separemos con ansias

—Una última cosa, empieza de cero y juntate con buenas influencias se feliz

—Eso quiero hacer, la semana que viene empiezan las clases estoi algo nerviosa pero ya te contaré que tal

—Bien espero que me des buenas noticias

—Eso espero yo también —una pequeña carcajada espapo de mis labios

—Aver si me das la noticia de que tengo cuñado

—¡Natasha!

—¿Qué? estoy segura de que no tardan en caer a tus pies

—Porfabor deja de decir tonterías eso jamás va a pasar

—¿Porque no?

—¿Tu me has visto? Soy horrenda, sigo siendo gorda aunque allá bajado de peso, tengo estrías, celulitis y mi cara no es que tenga nada de especial soy muy del montón tirando a fea, porfabor Natasha deja el tema

—Esta bien, dejo el tema porque tengo que ir a hacer recados. A Mañana te volveré a llamar y espero que me lo cogas a la primera.

—Esta bien, hasta mañana

—Asta mañana Shantal.

Colge la llamada y baje al salón a ayudar a mi mamá a poner la mesa
La cena fue como cualquier otra, mi padre comiéndose toda la barra del pan mi madre riñendo a mi hermana para que se coma la ensalada y yo como siempre pensando en mi mundo.

—He pensado en que podíamos hacer una barbacoa y invitar a los vecinos para conocerles. —la voz de mi padre me caso de mis pensamientos.

—Es muy buena idea cielo —dijo mi madre

—He visto que hay algunos jóvenes de tu edad Shantal, podría ser una oportunidad para conocerles antes de que comiences las clases

—Si, estaría bien

—Avisaré a los vecinos, la cena será el sábado a las ocho.