Voy con miedo a todos sitios por si te veo con alguien, o por si te veo solo,
me da miedo ir a entrenar y verte en una terraza,
de hecho, cuando entreno, solo pienso en ti, en contarte cuanto he aumentado esta semana o si me noto resultados, ya no es mi momento de desconexión, porque todo lo mío se volvió tan nuestro...Intento fingir que estoy bien, de verdad que lo intento, pero se me cae el mundo cada vez que me despierto.
Solo quiero dormir, porque mi cama es el único sitio en el que se que no voy a verte.Me da miedo no recuperarme nunca, me da miedo no saber como salir de ti, me da miedo darme cuenta que solo éramos tú y yo, que jamás seré con nadie.
Quizás solo recuerdas lo malo ahora, pero yo recuerdo hasta como olía una mañana de domingo a tu lado.
Ya no cocino para mi, ni compro en el paki la fruta, ya no uso el horno porque aun huele a tu cena favorita, todo me sabe a ti.
No he podido volver a Sangueta, aunque es mi sitio favorito, apenas íbamos, pero era algo tan nuestro que me duele cada grano de arena.
Ahora ya no escribo casi nunca, ni pongo a Alexa a tope mientras me ducho, porque toda mi música es tuya, ya no me apetece irme de compras, y no he vuelto a pedir en Prozis, porque mi vida tiene tu huella y la verdad es que no sé cómo empezar a gestionar todo esto.
Te quiero llamar por la noche para que me ayudes a dormir, quiero escucharlo, aunque no me lo quisieras decir, quiero pensar cada día que tú estas igual, que no quieres a nadie en tu vida todavía, quiero vivir con la esperanza de que no va a haber nadie, de ninguna forma.
Quiero ver One Piece mientras comemos pipas en la cama y lloro con cada historia hasta que me da congoja, que me abraces y te emociones al mirarme.
Mi vida ahora tiene eco.
Quiero dejar de llorar, de decirle a todo el mundo que tengo la cara hinchada porque tengo una puta alergia inexistente.
Dios es que, no quiero sentir esto mas, ya no quiero sentir nada.
