Chris podía escuchar los gritos afuera del estadio y justo en ese momento pudo entender por qué Luke prefirió quedarse ahí mismo.
—¿Estás acostumbrado a todo esto?.–preguntó.
—¿A qué?, ¿A los gritos o a la atención?.–dijo con gracia.
—Ambos.
—Bueno, ya han pasado varios años, así que creo que sí, estoy muy acostumbrado y halagado para ser sincero.
—Yo...tal vez no te lo había dicho por mis nervios, pero realmente adoro mucho tu trabajo, tu música es como una luz en mi vida.–dijo Chris con sinceridad.
Luke le sonrió.
—Agradezco mucho tus palabras, quizás si las personas no apreciarán lo que hago, decidiría retirarme.
—¿A que te refieres?.
—Bueno, este siempre fue el sueño de mis padres, que yo tuviera un buen futuro, y que mi talento fuera aprovechado... Pero a veces siento que no lo disfruto como antes.
Los ojos de Chris se abrieron con sorpresa.
—¿Quieres retirarte de la música?.
—No... Es decir, no aún, siento que tengo mucho que mostrar aún y no me veo haciendo algo más que no sea esto y realmente amo la música, pero algunas veces me siento presionado por mis padres, mi manager e incluso por mi mismo, siempre me exijo más y más, y llego a un punto donde ni siquiera mi cuerpo puede más.
Chris sintió un hueco en su pecho, jamás creyó que Luke podría llegar a sentirse así.
Siempre lo observaba desde la pantalla de su laptop o televisor, Luke realmente lucia feliz y jamás llegó a pensar en que podría sufrir o algo así.
—Yo...yo no sé que decir de verdad, no tenía idea de que te sentías así.
Luke soltó una amarga carcajada.
—Nadie tenía idea... hasta que caí en una fuerte depresión.
Chris no sabía cómo reaccionar, mientras el era tan feliz con la música que Luke hacía, por otro lado el mismo Luke estaba pasando un infierno.
Ni siquiera lo pensó, se abalanzó hacia Luke para abrazarlo.
Solo sintió como los brazos de Luke lo rodeaban, correspondiendo su abrazo.
Ambos se alejaron lentamente.
—Ahora estoy mejor, llevó un tratamiento psiquiatrico.–dijo Luke tratando de tranquilizar a Chris.
Chris asintió con la cabeza, pero aún así no podía evitar sentir un nudo en su garganta.
Era su ídolo, la persona que más lo había hecho sentir felicidad, y saber que Luke no había sido ni un poco feliz simplemente lo hacía sentir pésimo consigo mismo.
—Eres la persona más talentosa que conozco, yo solo... quiero decirte que si alguna vez sientes que estás solo en este mundo, recuerda que tienes millones y millones de personas que te aman por lo que eres y por lo que haces.–dijo Chris brindándole una sonrisa.
Luke acercó lentamente su mano al rostro de Chris y empezó a acariciar su mejilla.
Chris sintió como su aliento y su respiración se pararon por un momento.
¡Luke Adams lo estaba acariciando!.
—Hoy es mi cumpleaños, y créeme que este es el mejor cumpleaños que he tenido en la vida, así que gracias por eso.–dijo Chris sin siquiera pensarlo.
Al decir eso, Chris inmediatamente se arrepintió, ¿se había escuchado tan intenso como su hermana siempre decía que lo era?.
Luke simplemente le brindó una sonrisa de oreja a oreja.
—Feliz cumpleaños, Chris.
—Gracias, Luke.–respondió devolviéndole la sonrisa.
No podía creerlo, nada de lo que estaba pasando tenía sentido, de buena manera claro, Chris no quería que esa madrugada acabara jamás.
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even the stars don't shine like you
RomanceChris estaba totalmente emocionado, era su cumpleaños número 17 y justo ese día su cantante favorito iba a dar un concierto en su ciudad, tenía boletos e iría con sus mejores amigos, definitivamente ese sería el mejor día de su vida, pero ¿que pasar...