Luces, cámara y ¡Acción!

Pausa.

─Es recomendable que tome una pausa a su trabajo y de las redes sociales de ser posible. -dijo el médico.

En frente de él, la pareja solo pudo asentir. Todavía sin procesar la información dada por el señor de edad avanzada.

Dan frunció sus labios con desilusión, apretando la mano del otro actor. La desazón picaba en su pecho, dejando un fuerte ardor en toda la zona.

Desde días a atrás, llevaba sintiéndose relativamente mal. Y cuando comenzaron las náuseas junto a los vómitos, se planteo la idea de estar en cinta. Jaekyung, en medio de su emoción, no sé resistió la idea de ir al hospital para hacer exámenes.

Después de varias pruebas, dio como resultado fatiga por la estrés de llevar su vida con horarios cansinos para su débil cuerpo de Omega.

Sin perder más el tiempo, dijeron las últimas palabras de despedida para retirarse del consultorio.

El camino en auto era silencioso, Joo notaba a leguas lo frustrado qué estaba Dan, sus hombros y rostro tensos eran prueba de ello.

─Quizá, no sea el momento adecuado. Podríamos esperar más, llegará con el tiempo. -soltó con sensatez, apretando su mano entre la suya. Queriendo transmitirle tranquilidad.

El castaño, enmudecido, solo miraba el camino a casa.

A pesar de haber pasado dos ciclos de calor juntos, aún no tenían un cachorro. E ir cada vez al médico lo desilusionaba más, recibiendo la misma respuesta siempre.

Era un golpe muy grande para su orgullo como Omega casado y con Alfa.

Siento el único entre sus amigos y compañeros sin ningún hijo.

─¿Y sí yo soy el problema? -cuestionó con desánimo.

Antes eso, una vena se sobresalió en em cuello del de cabellera oscura, apretando con fuerza el volante y estacionando precipitadamente.

─Retira lo dicho, Dan. -gruñó entre dientes.

Odiaba cuando su lindo esposo se decía ese tipo de cosas, odiaba con todo su alma que no pudiese ser lo increíble que era.

─Entonces, ¿qué? ¿De quién es? ¿De quién más sí no soy yo? -tartamudeando, preguntó.

Joo suspiro pesadamente, sabía lo ansiosos que eran los Omegas con los embarazos. Y lo delicado que era ese asunto cuando la edad ya llegaba a los 30 o más.

Su querido Omega lo necesitaba en un estado calmado y no agresivo, suspirando nuevamente, le respondió, serenamente.

─Ese "yo", ahora es un nosotros. -agarró la mano que tenía el anillo, llevándolo a la altura de sus labios para besarlo con cariño. ─Aún tenemos tiempo, aún tenemos amor suficiente y lo seguiremos teniendo, Dan. -pasivamente, fue dando pequeños besos por toda su mano y palma.

Las palabras y acciones del Alfa calaron en el interior de Dan, logrando tranquilizarlo y volver a ser consciente de sus palabras. Sintiendo la calidez de su alma florecer y la luz de su corazón emerger.

Joo Jaekyung era su increíble Alfa qué lo amaba incluso si aún no tenían hijos.

─ ¿Podemos dar una pausa a esto? -dijo, refiriéndose al tema del cachorro.

─Lo que tú decidas. -finalizó, mientras volvía a conducir a su hogar.

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Próximamente actualización: 01/04/2024.