—¡Ay, es que es tan guapo! Venga, acompáñame porfa.
Rodaste los ojos y accediste a acompañar a tu amiga para inscribirse como manager del club de voleibol del Aoba Johsai.
Normalmente con sólo apuntarse ya era más que suficiente. Sin embargo, la lista de chicas que se morían por ser parte del equipo era larga, y todas ellas tenían un motivo: estar con Oikawa Tooru, el capitán del equipo, aunque fuesen sólo 5 segundos. Tu amiga Moriyama estaba incluida en esta, aunque tenía un pase porque tenía conocimientos del deporte en sí y, sobre todo, no gritaba como una loca cada vez que ese pejelagarto hacía cualquier cosa. Es por esto que el equipo de voleibol creó una especie de casting para ser manager del club.
Por tu parte, no tenías ni idea de voleibol. Al contrario que la mayoría, no estabas en ningún club, pues te dedicabas a entrenar por tu cuenta. La calistenia se convirtió en uno de los grandes pilares de tu vida, ya que te hacía sentir bien física y mentalmente. Los entrenamientos con el peso de tu cuerpo, los estiramientos y los ejercicios con gomas elásticas se transformaron en tu pan de cada día, y te encantaba. Lástimosamente, no conocías a nadie que compartiera la misma pasión que tú por ese deporte. Además, allí no estaba bien visto las mujeres musculadas.
«Y si son de piel morena como yo, peor me lo pones».
No pudiste evitar poner cara de asco al escuchar los gritos de las fans de Oikawa. Y no porque el chico apareciese, pues ni siquiera le conocías; era porque odiabas el ruido y no soportabas la muchedumbre. Sin embargo, aguantaste y no sólo porque no querías abandonar a tu amiga, sino porque estabas interesada en saber el funcionamiento del voleibol. El capitán del equipo saludó al grupo de jóvenes con una tierna sonrisa.
—Es lindo, ¿verdad? —preguntó tu amiga sonriendo.
Y sí, tenía razón. No era la primera vez que veías a ese chico, y cualquier persona en este mundo diría que Oikawa Tooru es bastante atractivo. Sin embargo... no es tu tipo.
En el gimnasio se respiraba un aire competitivo, y no sólo por parte de los chicos los cuales estaban entrenando. Las chicas se encontraban en un pelotón, y formaron un silencio que os sobrecogió tanto a tu amiga como a ti. Así que preferisteis colocarse cerca de los entrenadores del Aoba Johsai, a quienes saludasteis con una pequeña reverencia. Conocéis a ambos, son profesores bastante reconocidos en la escuela. Probablemente se sorprendieron al ver que os habéis alejado de las demás, quienes querían quedarse en un lugar donde pudiesen ver mejor al capitán del Seijoh.
—¿Ustedes también habéis venido para la prueba de manager?
Ambas girasteis la cabeza para ver al entrenador Nobuteru, cuyo rostro mostraba una gran seriedad. Tu amiga asintió, mientras que tú negaste.
—Yo sólo vengo a acompañarla.
—Ah, disculpa. En ese caso debes subir a las gradas —intervino el otro entrenador, Sadayuki—. Es que no queremos mezclar...
De repente, se escuchó un golpe fuerte. Uno de los jugadores, el número 12, estaba tratando de levantarse del suelo.
—¡¿Kindaichi, qué ha pasado!? —vociferó Nobuteru mientras se acercaba al joven.
Mientras que los miembros del club rodeaban al muchacho, las chicas cuchicheaban entre ellas. También pudiste oír suspiros de alivio.
—No se ha roto nada, ¿verdad? —preguntó el número 6— ¡Menos mal!
Sin embargo, el ambiente estaba intranquilo, y es que el suelo tenía rastros de sangre.
ESTÁS LEYENDO
miel |aoba johsai|
FanfictionOikawa lleva días soñando con la que parece ser la chica de sus sueños: no es japonesa, sino que es morena y sus ojos son como el color de la miel. Un día, apareciste tú. ━━━━━━━━╰☆╮━━━━━━━━ ...