Capítulo IX

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NamJoon se sentó en la mesa del comedor a la par de ambos donceles.

—¿Entonces la señorita EunByeol fue grosera contigo?

—Así es, Yoongi. ¿Así mismo te trato la primera vez que la conociste?

El pelirrojo asintió, mientras seguía cosiendo a mano aquel bordado de encaje que había sido tan trabajoso de elaborar.

—A este paso creo que a todo York le desagrada la señorita EunByeol.

Admitió SeokJin con franqueza mientras masticaba un pedazo de manzana y le ofrecía a Namjoon con una sonrisa.

—A todo aquel que considere inferior, los trata como si fuera la peor basura del mundo. Agradezco al cielo que el duque sea su hermano y no ella, no me quiero ni imaginar si fuera al revés.

—Solo puede decir que la pequeña EunByeol que conocí en mi adolescencia ha tenido un cambio radical.

—¿Cómo era ella antes?

La curiosidad de SeokJin era palpable por lo que Yoongi negó con diversión ante la expresión en el rostro de su amigo.

—Era una niña adorable, demasiado atenta, sensible y cariñosa.

—La verdad es que me parece poco creíble.

—Yo creo que sí es verdad, el duque me contó cómo era su hermana también, al parecer tuvo una institutriz que era muy apegada a EunByeol y que le hizo ver que las personas que no son nobles son inferiores, también se juntaba con niños y jóvenes con el mismo pensamiento.

Explicó Yoongi mientras dejaba el bordado a un lado.

—¿Ves? Y así en todo ese tiempo te rehusabas a creer que el duque no tenía atenciones contigo, si te tiene la confianza suficiente para contarte ese tipo de cosas.

—Bueno ahora sí lo admito, el duque tiene intenciones conmigo.

—¿Qué?

Ambos se quedaron sorprendidos y con la boca entreabierta ante la confesión de Yoongi, mientras el pálido empezaba a enrojecerse de manera inmediata.

—El duque habló conmigo y me habló sobre la posibilidad de cortejarme, pero primero que nos conociéramos un poco más y que tuviera tiempo para pensarlo.

—Con razón, se veía algo celoso cuando nos vió a los dos bajar del carruaje y parecía que iba a echarse para atrás de dejarme estar en su casa cuando dije que iba a empezar a cortejar a un doncel.

Habló Namjoon, seguro de sus suposiciones al ver como la expresión en el rostro de Taehyung cambio cuando mencionó el tema.

—¿Y le aclaraste que se trataba de mi?

—No quise entrar en detalles, cielo, sabes que no soy el mejor amigo del duque, pero eso no significa que no quiera hacerlo público. Sin embargo, me gustaría que mi cortejo hacia ti sea sin el ojo puesto sobre nosotros, pero si tú gustas ahora mismo lo gritaría a los cuatro vientos, dime lo quieres y te lo daré.

Yoongi soltó una risita al ver el rostro sonrojado de SeokJin, quién solo asintió con timidez ante la mirada cargada de amor que NamJoon le daba.

—Por cierto, me olvidé de mostrarles todas las telas que conseguí en mi último viaje. Estuvieron algo costosas, pero eso le dará mayor valor a las prendas que hagan, mis empleados están acomodandolas en el primer piso. Si no les gusta como están acomodadas, pueden decirles como quieren ustedes.

—Gracias, NamJoon.

—No agradezcan, queridos donceles, lo hago con mucho gusto.

—Bueno, si me disculpan iré abajo a seguir cosiendo esto.

𝐄𝐥 𝐃𝐨𝐧𝐜𝐞𝐥 𝐃𝐞𝐥 𝐃𝐮𝐪𝐮𝐞 | 𝐓𝐚𝐞𝐆𝐢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora