pa la europa (p. solari x l. beltrán)

one & only

tw; sexo 'semipúblico' accidental, charla sucia, degradación leve.

tercera persona.

lucas está cansado de que su novio lo ignore por andar jugando jueguitos hasta altas horas de la noche, y es algo que no le molestaría del todo si tan solo no lo hiciera cada vez que se ven. es decir, llega a la casa del pelinegro y este ya está con las manos sobre el teclado y al rededor del mouse, ni siquiera baja a recibirlo como es debido.

y ni hablar de saludarlo de la forma correcta, apenas un 'hola, lu' por encima que no espera por una respuesta de su parte, solo llega a dejarle un beso en la frente antes de volver a perderlo cuando se sumerge en el juego y los auriculares aislantes a todo volumen. hay días en los que no los usa, y eso es aún peor, porque puede escuchar toda la conversación absurda que mantienen todos los participantes en torno al videojuego que estén jugando en el momento. no entiende un carajo, y no solo porque no sabe de que hablan, sino porque hay algunos amigos de pablo -probablemente extranjeros- que hablan un poco...raro.

de verdad que lucas no entiende que tiene de divertido un jueguito de armas, es solo perseguir a alguien y dispararle hasta matarlo, no es la gran cosa y podría jurar que si él tuviera la oportunidad de jugar se aburriría a los quince minutos.

hoy es uno de esos días en los que pablo le dice por mensaje que entre directamente porque está jugando, obviamente, con su hermano -otro adicto- y como es online no va a poder pausarlo para abrirle la puerta por su cuenta. lucas se resigna y cuando llega hace uso de la llave que solari le entregó al año de noviazgo, cuando el pelinegro apenas conocía lo que era usar una consola. a veces le gustaría volver a los inicios, pero no puede interferir en algo que a su novio le apasiona hacer. aunque se sienta un poco solo e ignorado a su costa, es un precio que está dispuesto a pagar con tal de seguir teniendo a pablo en su vida.

lo ama demasiado, todo gritón y esquizofrénico como es cuando teclea con furia y desliza el mouse hasta que se desgasta. o cuando se enoja por perder y amaga con pegarle una piña a la pantalla, a veces es divertido verlo.

se desliza dentro de la habitación y rueda los ojos al ver al pelinegro peleando, como es costumbre, con su hermano mayor culpándolo de hacer trampa en call of duty. no entiende como podría, pero supone que es igual a cuando juega al mortal kombat y su contrincante se sabe todos los truquitos mientras que él apenas y sabe hacer lo básico con los controles. él sería el primer ejemplo porque no es un viejo y conoce varios juegos además del fifa, y pablo el que se enoja por ese motivo porque no le gustan los juegos de contacto directo. lucas simplemente no es bueno manejando una mira con el mouse, él es mas de un joystick porque tiene dedos rápidos.

pablo está participando en un directo, puede notarlo por el chat abierto en la pantalla del costado -tiene apenas un par de espectadores pero el juega más por diversión que por fama- así que pasa desapercibido hasta llegar a la cama y sentarse en la esquina mas cercana al set-up del menor, quien lo mira con una sonrisita y se estira para dejarle un piquito efimero que lucas disfruta todo lo que puede. es mas de lo que ha recibido los ultimos días y lo valora.

—hola, gordito—murmura el pelinegro, se escuchan chiflidos y burlas desde los parlantes cuando pablo desaparece del foco de la cámara y lucas reconoce la voz de santiago, el hermano mayor de su novio—callate culia'o.

a lucas le causa mucha risa que al pelinegro a veces se le escape el acento por la costumbre de compartir mucho tiempo con sus amiguitos, es tierno.

—hola, santi—saluda el mayor alzando la voz para que el contrario lo escuche, pablo frunce las cejas y lucas le saca la lengua.