—Che vino matias–dijo soledad,con corazoncitos en los ojos.
—¿EH?–dije mirándola.
—Si boluda esta afuera.
Salí y hay estaba el tarado.
—JAJA ¿que haces aquí boludo?–dije riéndome.
—Estaba al pedo y pinto viste.
—Claro,grande explicación,pasa que hace un calorsito,y en mi pieza estoy con aire.
Paso y subimos.
—Que onda solé,¿soltera?–dijo y le pegue un chirlo en la nuca.
—Soletera solo para vos mati–dijo soledad y la quede mirando mal.
—Bueno estoy de más,voy a traer papas.
Dije bajando y ene so encontré una pelota de fútbol,seguro era de matias.
—Che ¿es tuya?,la encontré abajo de la isla de la cocina–dije entrando.
Solé estaba con su celu y matias jugando a la play,venía tanto a casa que tuve que instalar una play en mi pieza.
—Uh si esta me firmo Messi cuando fuimos al mundial–dijo parándose y quitandomela pero se la tire a solé.
—Na déjala,la vendo y me compro una casa y mucha ropa–dije y los dos pelotudos me miraron.
—Animal–me dijo y me cague de risa tirandole la pelota en la cabeza.
—Me chupa un huevo,che son casi las 5 ¿a que hora te vas a ir?.
—Para abejaaaa,me quedo a dormir tenes como 30 colchones–
Lo quedé mirando.
—Mm tendremos que poner mucho perfume–dije mirando a solé.
—AY DISCULPA GORDI–dijo empujándome.
—Amigooo,me fui dos segundo y ya me comieron las papas,como no que comen la boca y ya esta.
—Yo re de una–dijo solé dejando de mirar el celu.
—Tan hermanos no somos–me dijo matias.
—Chs,pelotudo tenemos literalmente la misma mancha de nacimiento.
Seguimos boludeando hasta que a matias se le da la mejor idea de jugar un partidito en el patio,eran las 6 y mi vieja ya se había ido,trabaja de enfermera.