01 | Distracción

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Iniciamos con uno bonito y tranquilo y sanito.

Resumen: Robert trata de darle consejos a Pablo, pero hay una gran distracción en frente de él.

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Robert es muy bueno dando consejos, ya sea sobre su técnica a la hora de jugar o sobre su vida, siempre tiene una palabra amable para cualquiera.

También tiene la costumbre de pasearse medio desnudo por los vestuarios. Pablo sabe que debería actuar más normal al respecto, pero se vuelve todo hormonas adolescentes alborotadas cada que el jugador polaco aparece con nada más que una toalla.

Pablo respeta mucho a Robert.

Había crecido viendo videos de Lewandowski, admirando al delantero con pasión infantil, viendolo como su ídolo.

Poder jugar a su lado se sentía como todo un sueño hecho realidad, él era una persona tan amable, tan linda, era imposible no caer rendido por esos bellos ojos azules. Así que lo escucha con sus ojos brillando de emoción, siguiéndolo cada que puede y aprovechando todas las oportunidades que tiene para tenerlo cerca. 

Entonces, Pablo respeta mucho a Robert, es su ídolo. Absorbe sus consejos como si fueran agua y él una esponja, siempre dispuesto a escuchar sobre que debe mejorar no solo en el fútbol, también en su vida.

Pero...

Está vestido solo con un short, su cabello un poco húmedo dejando caer gotitas sobre su espalda que siente evaporarse por la temperatura de su piel. Robert está parado frente a él, parloteando alegre sobre el partido recién ganado con nada más que una toalla sobre sus caderas.

Sabe que debe apartar la mirada de sus abdominales bien definidos, no imaginarse tomando su pecho entre sus manos para apretarlo y lamer su abdomen marcado, esperando poder bajar más y más y...

—¿Gavi? Kid, i'm talking. 

Parpadea, alejando su mirada lujuriosa el cuerpo semi desnudo de su compañero para ver sus ojos. Robert no parece darse cuenta de la sucia mente de Pablo, solo creyendo que está distraído porque le está hablando en inglés. 

—Lo siento. 

—Sure. Ya que no vas a escuchar, incluso cuando tú pediste mi ayuda para aprender inglés, te estaba diciendo que... 

Robert le repite lo que sea le estaba diciendo antes, pero las palabras se mezclan en su mente como si estuviera hablando en chino. Observa como gesticula con las manos mientras seca su cabello húmedo, nota que el resto de sus compañeros están abandonando los vestidores, todos ansiosos por irse.

Robert sigue hablando, seguro sobre como Pablo tiene que enfocar su cabeza en el juego y eso no significa lanzar su cabeza a los pies del equipo contrario. Sabe que debe prestarle atención, pero está demasiado aturdido por la forma en que sus manos sujetan la toalla antes de dejarla caer a un lado.

Y oh...

El deseo lo recorre tan rápido y fuerte que casi se le escapa un gemido, todo por ver el cuerpo desnudo de Robert. Aprieta un poco los muslos, su rostro poniéndose rojo al estar mirando de frente el pene flácido de su compañero.

Es grande.

Por supuesto, Robert es un hombre grande. Es una cabeza más alto que él y mucho más musculoso, pero realmente nunca pensó que también sería tan grande en este aspecto.

Pasa saliva, ignorando cada palabra que sale de la boca de Robert mientras sigue con la mirada la manera en que su polla se balancea, le llega casi a la mitad del muslo y le hace preguntarse cómo se vería erecto, colgando pesado por la excitación entre sus piernas o mejor aún, entrando y saliendo de él. 

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