Enamorada de un nerd. [EDITANDO & TERMINADA]

Capítulo 52

-Gemma, Marcel!-. Los gritos de mi madre inundaban la casa al igual que mis oídos haciendo que despertará de un mal humor pero eso se paso al recordar que hoy era el día, por fin.

-Ya voy!-. Oí decir a Gemma, su voz se oía exactamente igual que ayer.

Suspiré y tome mi ropa, me vestí y trate de bajar todas mis maletas pero terminé pidiendo ayuda.

-Mamá!-. Grité. -Necesito ayuda con esto, es muy pesado para mí-. Dije cansado tratando de cargarlas y pude escuchar la carcajada de mi madre.

-Lo siento-. Dijo cuando me pillo oyéndola reír. -Ahora voy-.

[...]

-Listo-. Dijo mamá orgullosa al ver todas las cajas y muebles dentro del auto de mudanzas. -Todo listo-.

-Y que pasará con mi instituto?-. Pregunté después de unos minutos de observar nuestro trabajo.

-Fue difícil volver a sacar tu expediente, pero lo hice, y sobre tu próximo instituto...-

Alargó causando el típico nerviosismo en mí.

-Será el mismo de antes-. Habló y solté un grito de emoción.

-He dicho que eres la mejor madre que podría existir?-. Pregunté mientras plantaba varios besos en su rostro. -Te quiero-.

-Me lo has dicho mucho, hijo-. Sonrió ante mi lado cariñoso. -También te quiero-.

Me giré tratando de tomar mi maleta pero me detuve al ver a Gemma sentada sobre los escalones de la escalera, sus ojos estaban un poco rojos e hinchados pero no como ayer, su vista perdida entre las cajas ahora dentro del auto.

-Gemma...-. Murmuré sentándome a su lado pero no me tomo importancia, parecía una especie de hipnotizada.
-Gemm..

-Que?-. Me interrumpió.

-Estas mejor?-. Pose mi mano en su espalda lo cual no le molesto, o eso creo.

-Eso... Creo-. Me sonrió con tristeza.

Le sonreí en respuesta y le di un pequeño abrazo.

El sonido de la cámara captándonos me hizo girarme confundido.

Mamá.

-Que?, es histórico que ustedes no estén peleando por lo menos una vez. Las últimas fotos de ustedes abrazándose eran de pequeños-. Dijo y sonreí al igual que Gemma.
-Hija... Estas bien?-.

-Perfectamente, mamá-. Sonrió ampliamente, nada comparado con la otra Gemma. Como lo hacen? Fingen tan bien, tal vez ya lo ha hecho conmigo otras veces.

Le di una seria mirada y ella se encogió de hombros sin importancia.

-No le menciones nada-. Me advirtió en silencio por lo que tuve que asentir.

-Bien-. Bufé.

-Es hora de irnos, chicos-. Mamá llamó desde la puerta. Tome mis maletas en manos y Gemma hizo lo mismo.

Ahora mismo no podía definir esta sensación de volver a Casa, era algo genial.

Salimos de casa, mamá hizo una ceña al Taxi y este se detuvo frente a nosotros.

-Marcel!-.
Mi corazón se detuvo al oír aquella irritable voz. Claudine.

La miré sin importancia y me adentré al auto pero su mano había jalado de mi brazo impidiéndome entrar.

-No te vayas-.

-No eres nadie para decirme que hacer-. Dije de modo frío y volví a girarme.

-Espera, tenemos que hablar-.
Volvió a jalar de mi antebrazo. Suspiré molesto.