◇•Grita, maldice y llora•◇

Primer día de clases

Por primera vez en 16 años estaba feliz de ir a la escuela, solo por el hecho de que era una ciudad nueva y empezar de cero otra vez y esas cosas, al fin y al cabo no importaba mucho.
Era primer día de clases..para mi, pero no sabía si llamar la atención o no. Así que sólo me puse un jean, una camisa roja con unas zapatillas normales. Desayuné y me fui; estaba un poco nerviosa, aterrorizada.
Llegué en mi auto, y todos me empezaron a ver. Sus ojos encima de mi otra vez, pero solo los ignoré porque eso solo me pondría más nerviosa. Y como tengo dos pies izquierdos maravillosos, me caí...como lo haría la torpe y tonta chica que soy, escuché las risas a carcajadas y la gente haciendo bromas sobre mi. El día no empezó muy bien.
Respiré y seguí caminando como si nada hubiera pasado, fui a mi casillero y todos seguían mirándome hasta que se acercó la disque fabulosa: Emily Bowen
- Asi que tu eres la nueva?
- Sep,esa soy yo...creo
- Soy Emily Bowen, mucho gusto
- Destiny Ters
- Pareces agradable
- Porque me estas hablando? - Ouuu..no debí decir eso
- Disculpa?
- Es que soy la nueva, la torpe del instituto...porque me hablaría alguien como tu?
- Solo quería ser tu amiga pero al parecer tu no
- Se sincera...porque quieres ser mi amiga?
- La verdad? Para ser popular
- Exacto, se como son las persona como tu. No les importa nada, solo quieren conocer a cada miserable persona del instituto o lo que sea, dicen ser amigos de todo el mundo pero no saben ni limpiarse la nariz. La popularidad es para gente mediocre
- Ya veo porque no tienes amigos, cuidate...como te llames
Por qué lo tengo que arruinar siempre?
Tal vez hice lo correcto, tal vez no, pero si quiero amig@s tienen que ser de esas que son verdaderas, como lo era Sara. En su funeral, no quise saber de qué murió, preferí quedarme con la duda... y fue la mejor desicion que tomé.
Entré al salón de clase, me tocaba matemática, vi a Emily diciéndoles algo a sus amigas y todas empezaron a reir, creo que era sobre mi. Había un asiento al final de la clase así que fui a sentarme ahí junto a una pared. Sola.
No quiero volver jamás aquí, no es el tipo de vida que llevaba en la otra escuela, allá yo era la popular mediocre, la que conocía a cada miserable persona, es sorprendente como las cosas cambian de un día a otro...ayer estaba feliz por venir...hoy ya no quiero saber más de esta escuela