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Héctor

Cuando la chica me pegó ese tortazo y se fue, me quedé paralizado y segundos más tarde entré al reservado donde estaban mis amigos.

-¿Donde te habías metido, bro? -Me preguntó Lamine.

-Mira, ves a esa chica de allí. -La señalé con el dedo y Lamine la buscó  con la mirada.

-Sí, ¿qué pasa? -Preguntó él. -¿Te la quieres follar?. -Volvió a decir.

-¡¡Noo!! -Dije yo. -Está borracha y va muy mal, ves que los tíos se están aprovechando de ella. -Dije

-Sí. -Dijo él.

-Te preocupa? -Volvió a preguntarme Lamine.

-Sí... -Dije

-Uy, eso es raro, ¡¡el señor Fort preocupado por una chica!! -Gritó y yo le empujé levemente.

...

Más tarde vi como ella se juntaba con una chica de pelo castaño, supongo que sería su amiga, y, el que estaba al lado de la chica de pelo castaño sería el novio del que me hablo la borracha. Los vi irse se la discoteca y me quedé más tranquilo.

Alba

Bfff, tenía una resaca increíble. No me acuerdo de nada de anoche. Solo de que le tiré mi copa a un chaval de pelo moreno con rizos y que después ese mismo chico me sacó afuera y yo le pegué una torta. Supongo que querría aprovecharse de mí.

¡Bien hecho Alba, que nadie se aproveche de ti!

Esta mañana mi madre me llamó para hablar de un tema importante. Así que estaba yendo hacia el salón.

-Siéntate. -Dijo mi madre sentada en el sofá con mi hermana al lado.
Me senté.

-He conocido a un hombre. -Dijo mi madre de golpe. Como podéis comprobar es muy directa.

-¿Qué? ¡¡Pensaba que no habías superado a papá!! -Dije yo sorprendida.

-Cariño, no es superarlo, es admitir que ya no está con nosotras. Y yo lo he admitido. Admítelo tu también. -Respiró para mantener la paciencia.-Creo que yo también me merezco ser feliz de una vez por todas.

-Pero...

-A lo que iba. Llevo varios meses quedando con Javi, es un chico encantador y quiero que lo conozcais en persona. -Dijo mi madre otra vez.

-No entiendo para qué quieres que lo conozcamos. -Dije

-Va a ser vuestro padrastro, de hecho me voy a casar con él -Dijo mi madre y yo ahí si que aluciné.

-¿QUÉ? -Dije yo.

-Mamá, no es demasiado rápido para casaros... -Dijo mi hermana.

-Cielo, llevamos bastante tiempo conociéndonos, nunca os lo he dicho por miedo a vuestra reacción, realmente estoy muy enamorada, y, si no es ahora, ¿entonces cuando?-Suspiró de nuevo.-Yo también me merezco ser feliz, desde que tu padre nos abandonó, estoy metida en la misma rutina de todos los días, eso cansa, ¿sabes?-Nos hizo entender.-Ya  está decidido y no vais a hacerme cambiar de opinión. Esta noche vamos a ir todos a cenar.-Sentenció mi madre firme.

CULPABLESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora