PRÓLOGO 1.0

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La tierra, siglo 22, año 2126, en uno de los edificios más altos de la tierra del sol naciente, en un apartamento lleno de lujos y tecnología futurista, miraba con cierta tristeza, la ciudad o lo poco que se puede ver de ella, ya que la contaminación era extrema en esta era.

Pero no solo es en este país el que sufre este destino, sino todo el mundo, porque a mediados del siglo 21, estalló la tercera guerra mundial, dejando devastado todo el planeta, matando, a millones de especies de plantas, animales y humanos.

Sin embargo, no todo se perdió, es verdad que millones murieron, pero otra gran parte pudo sobrevivir y prosperar, dentro de lo que cabe, pero esa gente vive explotada por corporaciones multimillonarias, apenas pagando un salario mínimo a la gente de abajo.

La tecnología no avanzó nada en los hábitos de salud ni restauración planetaria, se enfocaron en el desarrollo de supercomputadoras y mejores formas de evadir el aire tóxico del mundo.

En este año, en todas las redes sociales conocidas se ha anunciado un nuevo juego, pero esto que tiene de relevante, pues este juego es una promesa que ofrece demasiada libertad, de la prisión que llamamos vida.

Este juego se hace llamar Yggdrashil un MMO RPG, de mundo abierto extremadamente grande, con millones y millones de kilómetros para explorar y conquistar, con un gran sistema de batalla y creación de personajes. Un nuevo juego para muchos, para mí, fue una revelación.

Así es una revelación, mi nombre en este mundo es Sasaki Kure de 27 años de edad, uno de los tantos magnates que explotan a sus empleados, pero también soy un ex residente de la tierra o bueno, la tierra que no está sumida en un invierno nuclear, antes era un joven con una vida promedio, con gustos promedios, pero de alguna forma termine en el cuerpo de un magnate de una tierra que paso una Tercera Guerra Mundial.

Cree que tarde mucho en asimilar esta impactante noticia, bueno no todos los días cambias de cuerpo, de realidad y de vida, de la nada, en especial la comida fue lo más difícil de aceptar, ya que la comida de este mundo simplemente es asquerosa y con un sabor bastante repugnante, pero lo que más me sorprendió fue la noticia del lanzamiento de Yggdrashil.

Pero como es que un juego de computadora puede golpear mi mundo de forma tan abrupta, bueno es simple, pues este juego ya lo conocí en mi vida anterior, pero no fue porque jugué un juego con el mismo nombre o algo así, sino por el hecho de que este juego está dentro de la historia de un anime que vi en mi vida pasada llamada Overlord.

Ese era uno de mis animes favoritos. Conozco mucho de su historia, de la aventura del ser supremo conocido en el nuevo mundo como Ainz Ooal Gown, el Rey Hechicero del Reino Hechicero, el Magic Caster más poderoso conocido en la época, además de sus aventuras y conquista del nuevo mundo que exploro.

Estoy emocionado, pero asustado, no sé cómo actuar, no sé si quiero ir al nuevo mundo, o si debería acercarme a los 41 seres supremos. He estado horas pensando que hacer y que no, pero de un momento a otro tomé una decisión que cambiara no solo mi vida, sino la de toda una historia ya escrita.

Ya eran las tres de la mañana cuando por fin me pude tomar una decisión. Es verdad que aún cabe la posibilidad de que solo sean puras coincidencias y que realmente me haya vuelto loco, pero vale la pena el riesgo.

Así, rápidamente me levanté de mi cama y me fui a la computadora que tenía en un cuarto especial, así me senté, conectando mi interfaz neuronal a la de la computadora.

Lo primero que hice fue comprar el juego en preventa, que era algo caro, pero siendo el dueño de la empresa tecnológica más grande del mundo, no fue ningún problema.

Pasaron días, luego semanas y meses, hasta que por fin la espera acabó. La verdad estaba algo ansioso, ya que no solo era yo el que estaba esperando el estreno del juego. Fue un evento de talla casi mundial, pues, por lo que pude investigar, al menos hoy habría conectado 20 millones de jugadores.

EL ÁNGEL DE NAZARICK RE-EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora