CAPITULO 6

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Que aburridos han sido estos días.

Ya han pasado dos semanas desde que tuve esa conversación con Jael, y he tratado de cumplir mi promesa. No ha sido fácil, pero no puedo apresurarme, debo ser inteligente y si con eso debo ser paciente pues lo seré.

A veces pienso que la vida es un negocio, la información se consigue por tratos, y la manera más inteligente de conseguir lo que necesito es cooperando.

Estás dos semanas no he hablado mucho con Jael, solo unos cuantos saludos y ya, de vez en cuando cruzamos miradas, pero nada más.

He estado todo este tiempo con Mónica y Mariana. Haciendo unas que otras tareas y estudiando juntas, así que todo marcha con completa normalidad.

La clase de inglés está por terminar y me encuentro sumergida en mi libro de ejercicios de vocabulario.

La profesora asigna algunas actividades para dar por terminada la clase. Jael está diagonal a mi un puesto más adelante, así que observo como escribe algunas cosas en su libreta ara luego recojer sus cosas y levantarse de su silla. Hago lo mismo que él pero me detengo un momento y observo que se da la vuelta y camina en mi dirección, Mónica y Mariana lo notan y automáticamente se levantan con sus cosas para irse, pasan por su lado, lo saludan y salen de el salón casi corriendo.

Que traidoras.

Cuando Jael llega a mi lugar se queda mirándome un momento antes de decir algo.

— Disculpa por no saludar antes, no quería acercarme de la nada, pero igual pasaría. —comienza él, yo haciendo con la cabeza a modo de saludo.

— Está bien, no hay problema.

— Vale, gracias. Quería preguntarte si ya tienes pareja para la tarea de literatura, he visto que Mónica y Mariana la harán ellas.

— Pues si... Por lo general yo hago mis trabajos en grupo sola y...

— ¿Puedo hacerla contigo? —pregunta y me mira con curiosidad. Se ve muy tierno.

— eh... No lo sé, no creo que sea buena idea, estoy acostumbrada a hacer las tareas sola, como ya te dije...

— ¿Segura? Bueno igual no pasa nada si esta vez la haces con alguien más ¿No? —insiste. Lo pienso un momento, supongo que no estará tan mal, a demás me ayudará a averiguar un poco más sobre él, y sobre mi supongo.

— Bueno... Está bien, hagámosla juntos, puede ser... ¿Mañana? En mi casa a las 4:30 de la tarde ¿Te parece? —pregunto un poco insegura por mi madre y mi padrastro.

Llegan a las 6 a casa todos los días, pero debo estar siempre un paso por delante de ellos para evitarme problemas como los de el fin de semana.
Otra vez han perdido el control, y todo por qué estaban peleados entre ellos mismos, ya estoy cansada, pero no puedo hacer nada más que soportarlo hasta que pueda salir de allí en un año y medio quizás.

— Me parece bien, entonces nos vemos mañana. — termina de decir y se retira luego de despedirse.

Ok. Debo prepararme. Lo mejor es que empiece con el guión hoy, y mañana con el, lo revisa y lo terminamos, haci es más rápido y tendremos tiempo para hablar de otra cosa.

Cómo por ejemplo de Ada y de lo que sucedió hace 7 años atrás.

Exactamente, pero ya, volviendo a la realidad.

Cómo por arte de mágia Mónica y Mariana aparecen a mi lado y me miran con cara de asombro.

Lo que me faltaba.

— Asi que has quedado con el en tu casa.

— Y en la tarde.

— Y justo cuando estás sola.

Atrapada entre sentimientos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora