I. Sombras de la noche

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Siempre se esconde en el bosque de Campbell, en las sombras que bailan los árboles con la niebla.

Siempre vestidos de negro, una elegancia siniestra que refleja  misterio y seducción. 

Siempre despiadados e inteligentes como si hubieran nacido en las sombras mismas.  

Siempre solo siendo yo, así de frágil

Siempre escondida entre mentiras y secretos.

Si tan solo fuera adivina hubiera huido de mi destino que me cambió hasta al grado de amar la muerte.

Viernes por la mañana

El camino hacia la universidad se convirtió en una travesía angustiante. El reloj marcaba las ocho en punto y mi primera clase comenzaba en veinte minutos, apenas suficiente para acelerar el paso y evitar llegar tarde

Cerca de la casa de los Morty, una multitud de policías merodeaban, sus gestos tensos y sus movimientos enérgicos ¿Algo había pasado? No me daba tiempo de averiguar, iba tarde. Desvié mi ruta, tratando de evitar el bullicio, y llegué corriendo al campus.

Bianca y Valentina, mis amigas más cercanas de la universidad vinieron a mi encuentro, pero sus expresiones de alegría se desvanecieron al instante. 

—Hay algo que debes saber, Lilith —dijo Valentina, con un dejo de ansiedad en su voz.

—No tenemos tiempo para chismes ahora, chicas —interrumpí dejándolas atrás.

—Isadora Devlyn está muerta...—habló Bianca.

Retrocedí para mirarlas y su expresión de emoción como de costumbre ya no estaba.

—¿Qué? —un frío extraño recorrió mi espalda y me senté en una de las bancas del largo pasadizo.

—Isadora Devlyn y Astrid Noir, han sido encontradas la noche de ayer por los Morty en su patio trasero, ellas volvían de la universidad  después de organizar la actividad de donación de hoy, se dice que han sido halladas en un charco de sangre, lamentablemente  cuando la policía llegó Isadora ya estaba muerta. —relató Valentina con un aire de horror en sus palabras.

—Y Astrid, esta luchando por su vida, mi papá que estaba de turno la atendió y me contó que llegó apuñalada pero que tenía pulso... pero Isadora...—Bianca hizo una pausa, como ordenando lo que iba a decir —Isadora no tenía corazón y un ojo cuando la encontraron, es como si se lo hubieran arrancado sin piedad.

Me quedé helada sin parpadear, inmóvil sin poder decir una palabra y es que no lo podía creer, Isadora Devlyn estaba muerta, ella era la nueva novia de David, mi ex novio que a solo una semana de cortarme anduvo con ella, seguía procesando todo, nunca le desearía la muerte a nadie ni a la misma Isadora que me había quitado al chico de mis sueños, no a ella.

—Despierta a la realidad—chasqueó con los dedos Bianca.

—No lo puedo creer —es lo único que se me salieron en palabras.

—Entremos a clases—comentó Valentina.

Toda la clase estuve tan pensativa, repasando algo que no me esperaba, dando mil vueltas a algo tan horroroso, en el campus la noticia se disparó, todos hablaban de Isadora y Astrid y de lo que les pasó ¿Había un asesino en serie suelto? Ya eran tres asesinatos con esto. 

No quería quedarme más en clase y salí lo más rápido posible, tomé aire y vi a lo largo venir a David con los ojos rojos como si hubiera llorado tanto y lleno de orejas, todo descambiado como si recién se hubiera levantado de la cama.

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⏰ Última actualización: Apr 02 ⏰

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ENIGMA -  Trilogía Oscura perdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora