capitulo 30

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—Buenas noches —una chica con el uniforme de Trattoria Bella Italia, nos daba la bienvenida.

—Buenas noches —Respondimos juntos.

—¿Cuenta con reservación? —levantó la vista de su cuaderno mirando a Killian, antes de mirarme y sonreirme.

—Sí, está a nombre de Killian Mitchels —respondió tranquilo.

—Ah, sí claro —dijo la joven sin mirar el cuaderno– Acompañenme, los llevaré a su mesa.

Mire a Killian con una sonrisa antes de tomarlo de la mano y caminar detrás de la chica.

Era un restaurante muy lindo, antes de trabajar en la paletería me había tocado cubrir algunos turnos aquí en eventos junto a Jhon.

No había tenido la oportunidad de venir aquí como cliente, pero si había probado la comida trabajando en cocina.

Tomamos asiento en una de las mesas del balcón y le dimos las gracias a la chica.

—Este restaurante es muy lindo y tiene una vista hermosa—comente, dejando mi celular en la mesa.

—Si, es un poco difícil conseguir reservación aquí, pero como mi padre ayudó a la dueña con algunos asuntos legales, podemos venir y reservar cuando queramos —comento con una sonrisa.

—Ya veo —no pude evitar reírme.

—¿Qué pasa? —preguntó.

—Mi familia y yo podemos venir cuando queramos, sin reservación —admití.

—¿Tienen alguna membresía? —preguntó confundido.

—No —me miró aún más confundido— Jhon y yo trabajamos aquí en muchas ocasiones, cubriendo eventos y ayudando cuando el local estuvo a punto de cerrar por la falta de clientela hace algunos años, a día de hoy la dueña nos sigue insistiendo para trabajar aquí, quedó muy agradecida con nosotros, así que cuando queramos venir, podemos hacerlo sin necesidad de reservación, digamos que es su forma de retribuirnos un poco de lo que hicimos por ella —comenté.

—Espera... Me dices que tienes las puertas abiertas para trabajar aquí cuando quieras, pero en cambio ¿Escogiste trabajarle a Gustavo?.

—Si, verás el cuento es más complicado de lo que se ve.

—Tengo todo el tiempo para tí.

—A ver, aquí el pago es muy bueno, ¿Sí? Pero la explotación laboral es peor que en otros lugares, además, aquí tienes horario de entrada, más no de salida. —Si, a mi también me hubiese gustado trabajar aquí y ahorrarme todo el drama de Gustavo.

—Vaya, eso no lo sabía —me miró por un momento y una pequeña sonrisa se reflejó en sus labios —Quien lo diría.

—¿Qué? — pregunté confundida.

—Tuvimos tantas oportunidades de conocernos... Trabajaste en la paletería y yo frecuentaba el lugar con los chicos hace algún tiempo antes de la intoxicación, eres amiga de Luigi y yo lo conozco desde hace años, compartí con su familia en muchas ocasiones y me quedé con él muchas otras, además, trabajaste aquí, yo he venido con mis padres a comer y a eventos en demasiadas ocasiones.

—Que pequeño es el mundo.

—Dicen que cuando dos personas están destinadas a estar juntas, solo la vida sabe en qué momento debe unirlas.

Y vaya que supo el momento indicado.

—Me hubiese gustado conocerte antes –admití— creo que me hubiese ahorrado unos cuantos problemas.

Love Yourself, Emma.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora