||𝕍𝕒𝕣𝕤𝕎𝕖𝕖𝕜||Solarballs||

𝑴𝑨𝑹𝑪𝑨 𝑫𝑬𝑳 𝑨𝑳𝑴𝑨 𝑮𝑬𝑴𝑬𝑳𝑨

Era doloroso, ver aquella marca enegresida en la muñeca de su amigo, y mas doloroso era escucharlo llorar desconsoladamente en su hombro mientras gritaba con desenfreno desahogando todo el dolor y sufrimiento que cargaba encima.

Venus escuchaba todo, tambien con unas cuantas lagrimas desbordandose de sus ojos, abrazaba fuertemente al contrario contra su cuerpo, el tambien estaba muy dolido por la perdida de su amigo, pero era mucho peor para el planeta anaranjado.

Lo habian logrado, a pesar de todos los esfuerzos que hicieron no pudieron evitar que ocurriera; la revolución lunar fue un exito, aunque, no solo acabaron con la vida en la Tierra, habian acabado con el, Marte y Venus no pudieron llegar a tiempo para ayudar y lo unico que pudieron ver en aquel lugar fue el cuerpo destrozado del que era el unico planeta habitable...sin vida. Luna habia quedado gravemente herido e inconsciente y era cuidado por Mercurio.

Marte se desplomo en el suelo, junto al cuerpo inerte de su pareja deseando que esto fuera solo una broma, pero al ver que la marca de unidad en su muñeca iba perdiendo lentamente sus colores y se tornaba negra cual carbon se derrumbo. Comenzo a llorar y maldecir abrazando a su pareja lamentando no haber podido hacer mas para salvarlo.

El planeta toxico prescenciaba todo paralizado, lleno de ira e impotencia, por su mente solo pasaba la idea de encontrar a esas malditas lunas y volverlas polvo espacial, ¡Habian matado a su amigo!, pero, al ver a Marte destrozado asi no tuvo corazon para dejarlo solo, por lo que solo se limito a acercarse a el y tratar de consolarlo.

Puede que ambos hayan teniendo problemas con el planeta habitable pero no estaban preparados para este escenario. Marte aun amaba a Tierra, era su alma gemela, por mas problemas que tuvieran lo amaba por encima de todo, no podia soportar el hecho de verlo ahora sin vida.

Ni siquiera pudieron arreglar las cosas, Marte se tuvo que quedar con el amargo recuerdo de sus ultimos momentos juntos teniendo una nuy fuerte discusion, y ese sentimiento empeoro cuando al hablar con Luna este les confeso todo lo que habia ocurrido antes del ataque, el como el y Mercurio lo habian encontrado a punto de suicidarse.

Por mas que le dijeran al planeta naranja lo contrario, este no podia evitar culparse de causar la tragedia.

—¡Si tan solo hubiera...hubiera estado ahi con el!—Se lamentaba Marte aferrandose con fuerza a su amigo, llorando desconsoladamente.—¡Nada habria pasado, Tierra seguiria con vida!

Venus estaba harto de escuchar a su amigo culparse por la muerte de su pareja, no le era tedioso ni mucho menos, pero odiaba que se despreciara asi, si de algo estaba muy consciente es que Marte fue y es la mejor pareja que Tierra pudo desear, eh hizo todo lo que estuvo a su alcance para ayudarlo.

—Marte, deja de culparte por eso...—Dijo por lo bajo acariciando su cabello.

Marte no respondio a eso y solo siguio llorando.

Venus tambien comenzo a llorar ligeramente, le dolia la perdida de su amigo, paso casi toda su vida con el, nunca fueron muy cercanos claro, pero le tenia cariño y el pensar que de ahora en adelante no lo vaya a volver a ver era un sentimiento horrible.

Los meses fueron pasando y sin duda las cosas habian cambiado mucho sin Tierra; Luna, ahora recuperado, era el nuevo satelite de Mercurio, Venus y Marte le habian ofrecido que los orbitaran pero Luna se habia negado, y despues de que les contaran sobre su relacion a los demas ahora entendian la insistencia en orbitar al pequeño planeta rocoso.

Mientras que Venus y Marte se habian hecho mas unidos, se reunian a menudo y habian construido una amistad muy solida. El planeta naranja de a poco se iba recuperando de su dolor, con ayuda de sus amigos y sobretodo de Venus, este nunca lo dejaba solo, sienpre que lo necesitaba ahi estaba el planeta toxico para el, apoyandolo, consolandolo, la verdad, si no fuera por Venus no sabia que habria sido de el.

Lo cierto es que toda esa atencion por parte de Venus tenian una explicacion.

Desde hace poco tiempo el planeta Toxico habia comenzado a desarrollar sentimientos hacia su amigo de color naranja.

No pudo evitarlo, cuando menos se lo espero su nucleo empezo a dirigir sus latidos hacia Marte. Por mas que lo trataba de negar sus sentimientos estaban ahi y conforme pasaba el tiempo se iban haciendo mas fuertes hasta que llego a un punto en el que simplemente no podia seguir renegando de ellos.

Amaba a Marte, estaba perdidamente enamorado de el.

De su sonrisa, de su fortaleza, de su gentileza, empatia, sentido del humor,. De su belleza extraordinaria, su cabello sedoso y brillante, de sus ojos vivos y expresivos, de su cuerpo de ensueño...diablos ¡Amaba todo de ese pequeño planeta naranja!

Pero se habia abstenido de confesarle su amor abiertamente por los momentos, Marte aun estaba atravesando un duro duelo por la muerte de Tierra que aun no habia superado del todo. Debia ser paciente y esperar un mejor momento para declararse pues lo que menos queria era arruinar su bonita amistad.

Tambien estaba el hecho de que sentia que estaba traicionando al planeta habitable al haberse fijado en la fue su alma gemela.

—Ay Andromeda—Exclamo Venus frustrado.—Por favor, ayudame con estos sentimientos que me estan matando...

El no tenia algun alma gemela que supiese, aun no tenia ninguna marca que lo certificara, y el hecho de que su enamorado ya haia encontrado a su destinado le hacian ver que su relacion con Marte nunca iba a funcionar.

Por ello, definitivamente no espero lo que se iba a encontrar esa mañana.

Una hermosa marca de un corazon de color naranja palido...con el nombre de Marte en medio.

Venus sintio como su nucleo se acelero al ver aquelloen su muñeca, eso debia ser un sueño...o una broma muy cruel por parte de alguno de sus amigos.

Pero no, era real, esa marca era real y fue el inicio de una bonita historia de amor

Las almas gemelas muchas veces no estan determinadas por el destino, sino que uno mismo y las ciscunstancias las construye...

Ame este capitulo la verdad ♥➳♥

Espero que les haya gustado.

Chris se despide.