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Solamente se miraron unos segundos a los ojos para saber quién era realmente la otra persona, pero sabían que sus nuevos estatus jamás permitirían que aquello fuera posible.
Así que se sonrieron y con adrenalina recorriendo sus venas decidieron tratarse como si fueran dos extraños.
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.Se detuvo en seco al sentir que una presencia aparecía de repente enfrente de el.
Levantó la cabeza hacia una rama que se tambaleaba por el peso que tenía arriba.
Su ojo onix se tiñó de rojo y gruño para el desconocido.
Pero el castaño frente a el no mostró signos de defensa, en cambio sonrió casi con malicia.
El ninja frunció el ceño, pues aquella persona se le hacia muy extraña, pero movió la cabeza quitándose la curiosidad de la cabeza, pues quién tenía enfrente es un criminal, lo sabía por la vestimenta que llevaba.
—El gran ninja de Konoha — hablo suavemente el castaño, pero el azabache se sintió estático, pues esa voz movió algo dentro de el.
Entonces su sharingan ardió y miro fijamente los ojos verdes del criminal, más específicamente el izquierdo, el cual parecía brillar.
—Tu.. — lo supo en seguida, sabía quién era el.
El criminal sonrió al saber que fue reconocido.
Ambos se miraron por eternos segundos, el omega extasiado y expectante por las acciones que podía tomar el otro, el alfa confundido y con un cosquilleo en el estómago.
Pero su momento se interrumpió al escuchar ramas lejanas moverse.
El castaño desapareció y el azabache sintió que se le apretaba el pecho.
—¡Obito-san! — tres ninjas llegaron a dónde estaba el alfa, estos lo miraron con preocupación.
—¿Paso algo? — pregunto uno.
Obito les dió la espalda y gruño.
—Nada, sigan buscando a esos criminales.
Los tres asintieron y se fueron.
Pero el alfa se quedó unos segundos más, sintiendo que un olor coqueto llegaba a su nariz.
Suspiro y decidió seguir con su camino, decidió fingir que no había visto nada.
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「Publicado: 7/Abril/2024」
「Palabras: 322」
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「Dos extraños」
FanfictionSolamente se miraron unos segundos a los ojos para saber quién era realmente la otra persona, pero sabían que sus nuevos estatus jamás permitirían que aquello fuera posible. Así que se sonrieron y con adrenalina recorriendo sus venas decidieron trat...