𝙇𝙐𝘾𝙆𝙔 𝙈𝙀 -𝙇. 𝘾𝙖𝙨𝙩𝙚𝙡𝙡𝙖𝙣 & 𝙅. 𝙏𝙤𝙙𝙙 (pjo/dc)

004. The Society of False Facers

All this time I was finding myself, and I
didn't know I was lost

LILIANNE

Hoy era un día de quedarme con mi querido padre, de vuelta de su...digamos pequeño "retiro" temporal.

Nuestra primera interacción después de semanas no había sido buena.

Como siempre.

Por eso ahora estaba tratando de trucar la nueva ventana que se había implementado en mi habitación, sin éxito por el momento.

Le maldecí en todos los idiomas que conocía (concretamente en tres).

Estaba claro por mi mueca cada vez que nos veíamos que no me caía de lo mejor.

Él, por otra parte, no podría decirte que expresión tenía por culpa de esa estúpida máscara del inframundo que llevaba casi todas las horas que lo veía.

Odiaba el hecho de que siempre acababa por encontrarme cada vez que huía de su casa e iba al lugar que consideraba mi hogar.

Pero sus lacayos (¿Olvidaba mencionar que él era uno de los Jefes criminales más peligrosos de Gotham?) tenían ojos por todas partes, reconocibles por su nada sutil distintiva cara cubierta para evitar su identificación real.

Mi padre era nada menos que Black Mask, quién, después de un enfrentamiento con Batman y su posterior encarcelamiento en Blackgate, había vuelto a casa.

Obviamente se había dado cuenta de que no estaba allí, por lo que había ordenado a sus subordinados que me encontraran.

Había sido la anterior noche, con Luke y Jace, que los había notado mientras mis ojos atentos a ellos (estaban encargándose de desmantelar un auto sin vigilancia) se desviaban a un grupo con mascaras negras.

Jason ya los había notado y sabía a quién exactamente pertenecían, por lo que con una mirada mía entendió que debía desaparecer con Luke.

El pelinegro entonces agarró la mano del rubio y desaparecieron como si no hubiese estado nadie.

Hacía ya un tiempo que Jason sabía sobre mi padre, prácticamente desde que le conocía.

Teníamos una promesa que le había hecho cumplir a pesar de su desaprobación.

Consistía en que, a pesar de que me llevarán por la fuerza los malditos lacayos (de ninguna manera me iría voluntariamente), él...bueno, supongo que ahora, ellos no se interpondrían en mi camino.

No quería ni imaginar que pasaría si mi padre se llegara a enterar y las posibles manipulaciones que podría hacer en contra mía.

Tampoco quería que ninguno de ellos saliera lastimado.

No era ajena a lo que mi padre hacía desde que pasó aquel accidente de la empresa que había heredado de mis abuelos paternos, muertos en extrañas circunstancias poco después de mi nacimiento.

Janus Cosmetics había pasado a manos de mi padre y había triunfado durante algunos años, con las innovaciones de mi progenitor.

Esos años habían sido los únicos "normales" en mi infancia, cuando mi padre al menos había intentado mantenerme protegida.

Aunque él ya estuviera dentro del territorio criminal.

Cuando la empresa quebró por las demandas de las personas que sufrieron por los productos cancerígenos, a él no le quedó de otra que venderle lo que quedaba de ella a WayneTech.

Pero lo peor no había sido eso, lo peor era que, cuándo parecía que mi padre estaba siguiendo adelante, yo había descubierto que él era uno de los nuevos villanos de Gotham.

Había escapado de casa esa misma noche para posteriormente encontrarme con él que ahora consideraba mi mayor confidente.

Jason había sido la estrella que guiaba mi camino.

No diría que lo consideraría mi hermano, porque sería mentirme a mí misma.

Por eso no habría nada en este mundo que no haría por él.

Eso incluye la posibilidad de que haya sido secuestrado en la zona de Ma' Gunn.

Quizás no me reconociera como la hija de Black Mask (ya había tenido un encuentro desagradable con ella y no me había reconocido), pero averiguría lo que pasaba cuándo se metía con los míos.

Luke, que había logrado crecer en un espacio de mi pequeño corazón, estaba incluido en la ecuación.

Posiblemente me llamarían paranoica si supieran que estaba cien por cien segura de que estábamos siendo vigilados por alguien.

Localizando las ubicaciones de sus móviles, no me equivocaba.

Veamos quién es la paranoica ahora, idiotas. -pensé, observándolos a través de la cámara de un dron controlado por mí.

Ambos estaban atados en unas sillas y rodeados por los niños de Ma' Gunn.

Desearía poder tener micrófonos en el dron, pero no había podido obtener más que uno prácticamente desechable que algún niño rico había dejado caer por las calles de la ciudad.

No me importaba saber quién era aquel T. D. que se leía en una pegatina pegada a la zona inferior del aparato cuando lo encontré.

Ahora me pertenecía a mí.

Sólo me lo había quedado ya que parecía tener varias mejoras que no tenía en su versión original, habiéndolo buscado en Internet.

Me daba pena lo que iba a hacer a continuación, pero no me quedaba otra opción.

Sería mejor que corrieran antes de que les alcanzará la explosión.

Estaba segura de que la sonrisa que sentía expandirse sería considerada "diabólica" por esos dos.

Dioses. Los extrañaba.

Aunque sólo hubiera pasado tan poco tiempo.

Observé por la pantalla de mi teléfono táctil como controlaba el dron para entrar por la ventana del almacén y movía los controles para que se estrellara contra las cajas.

Con un segundo de la cámara enfocando las llamas de fuego, mi trabajo terminó cuándo un mensaje de "ERROR" apareció en pantalla.

Antes de que continuará mi trabajo con la ventana, la puerta de mi habitación sonó.

Inspiré aire y cerré los ojos para generarme al menos una parte de la confianza en mí misma que las personas creían que tenía.

-Adelante.

La puerta se abrió y vi a uno de los lacayos de padre.

-Señorita. Su padre la espera para cenar.

Su voz sonaba amortiguada por la máscara que le cubría.

-De acuerdo, enseguida voy.

Él asintió para después volver a cerrar la puerta, dejándome sola una vez más.

Sentí mis músculos relajarse tras la tensión hasta apenas unos segundos.

Era hora de una cena incómoda.

NOTAS:

¡Espero que os haya gustado!
Muchas gracias por el apoyo <3

Este capítulo se dividirá en dos partes, siendo la siguiente la segunda.