The anti-hero: Attack on Titan -Parte 2-

Capitulo 10

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(Pensamientos)
Susurros
"Diálogos"
-*Pequeñas acciones*-.
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En una sala oscura y sombría, el aldeano que había sido capturado la noche anterior se encontraba encadenado, con su rostro marcado por el sufrimiento y la ropa desgarrada. Frente a él, el oficial Renzo y otro oficial lo observaban con expresiones severas.

Renzo: "Bien, aldeano. Sabemos que tu aldea está cerca. Solo necesitamos una cosa de ti: información. Queremos saber dónde está tu aldea y si allí se encuentra una niña llamada Ymir."

El prisionero permaneció en silencio por un momento, sus ojos mostraban determinación a pesar de su situación precaria.

Prisionero: "No diré nada. No importa lo que me hagan, no traicionaré a mi gente ni revelaré el paradero de Ymir."

El otro oficial frunció el ceño, claramente frustrado por la respuesta del prisionero.

Oficial: "Mira, aldeano. No estás en posición de negociar. Si no cooperas, las cosas se pondrán mucho peor para ti y para tu aldea. Ahora, dinos lo que queremos saber, y tal vez podamos considerar ser más... compasivos."

El prisionero apretó los puños con fuerza, resistiendo la presión de los oficiales.

Prisionero: "Pueden hacerme todo lo que quieran, pero no traicionaré a los míos. Ymir es inocente, no la pondré en peligro."

Renzo intercambió una mirada con el otro oficial antes de volver su atención al prisionero, con una sonrisa siniestra en el rostro.

Renzo: "Muy bien, aldeano. Parece que necesitas un poco más de... persuasión. Traigan las herramientas de interrogatorio. Vamos a ver cuánto tiempo resistes antes de hablar."

Rey Fritz: "Detente, Renzo. Yo me encargaré de esto."

El oficial Renzo asintió, retrocediendo para permitir que el Rey Fritz se acercara al prisionero. Con una mirada fría y calculadora, el Rey Fritz comenzó a hablar.

Rey Fritz: "Dime, aldeano, ¿tienes familia? ¿Alguien por quien te preocupes?"

El prisionero frunció el ceño, confundido por la pregunta del Rey Fritz. Sin embargo, decidió responder con cautela.

Prisionero: "Sí, tengo una familia. Pero eso no tiene relevancia aquí."

El Rey Fritz asintió lentamente, con una sonrisa que no alcanzaba sus ojos.

Rey Fritz: "Oh, pero sí la tiene. Porque si no cooperas, no solo sufrirás tú, sino también aquellos a quienes amas. Piensa en lo que les podría pasar si te niegas a colaborar."

El prisionero tragó saliva, sintiendo el peso de las palabras del Rey Fritz. Sabía que el Rey tenía el poder para hacerle daño a él y a su familia, y eso lo llenaba de temor.

Prisionero: "¿Qué... qué quieren de mí?"

El Rey Fritz se inclinó hacia adelante, su voz suave pero llena de amenaza.

Rey Fritz: "Solo queremos información. Dónde está tu aldea y si Ymir se encuentra allí. Si cooperas, podríamos considerar ser... compasivos. Pero si te resistes, no habrá límites para el sufrimiento que te infligiremos a ti y a los tuyos. Así que, ¿qué decides?"

El prisionero miró fijamente al Rey Fritz, sintiendo el peso de sus palabras. Sabía que estaba en una situación desesperada y que el Rey Fritz tenía el poder para hacer realidad sus amenazas. Sin embargo, su determinación seguía firme.