One short 2- Pataleos y castigos

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(18+)

[Tierra 1610]

Miguel se estaba llevando a Gwen sobre su hombro. La chica se había escapado a la Tierra 1610 y había causado algunos estragos accidentalmente.

El hombre está enojado con la chica y está no ayudaba mucho para calmarlo, ella se resistía mucho y pataleaba locamente.

-¡Bajame!¡No soy una niña para que me cargues!

El Spider-Man ignoro las quejas de la Spider-Woman, está estaba muy enojada pero no más que Miguel, sólo este último se estaba controlando.

-¡Que me bajes te digo! Puedo caminar¡¿Sabes?!

-Deja de hacer escándalo. Si hay alguien por aquí va a pensar que te estoy secuestrando...

El hombre suspiro y se metió por un portal con Gwen sobre su hombro.

[Cuartel de la Sociedad Araña]

Miguel salió del portal con la chica cargada sobre su hombro. Está última pataleaba muy enojada.

Todos los miraban. La Spider-Woman estaba algo avergonzada pero seguía luchando, pero al hombre no le importaba en los más minimo. Igual, era el jefe y líder de la Sociedad Araña y¿Quién le iba decir algo a su jefe porque estaba cargando a una chica que pataleaba locamente?

Miguel llevo a Gwen a su oficina.

-Llegamos... Ahora tu y tu culo escurridizo están en problemas.

-¿Que?¿Que vas hacerme?

-Darte un buen castigo, como mereces por haber causado tantos problemas en la Tierra 1610.

-¡No es mi culpa!¡No lo hice intencionalmente!

-Lo se. Pero igual, te voy a dar una lección.

Miguel sostenía a Gwen en su hombro mientras sacaba unas esposas sexuales de un cajón.

-¡No vas a amarrarme!¡No lo permitiré!

La chica pataleaba y se sacudía intentando huir del agarre de su novio.

El hombre agarro a su novia y la puso en su silla, la Spider-woman luchaba y luchaba pero no podía escapar. Miguel esposo a Gwen a la silla. Está última seguía pataleando.

-¡Deja de moverte!

Exclamó el hombre mientras tomaba otro par de esposas y de las puso en los tobillos.

-Muy bien... Ahora estás inmovilizada, de cierto modo.

Gwen seguía moviendo y pataleando a pesar de tener sus piernas juntas por las esposas.

-¡Esto no es justo!

-Nunca dije que lo fuera...

Miguel al ver a Gwen pataleando locamente aún, suspiro pesadamente y golpeó su escritorio con el puño llamado su atención.

-¡Lyla!¡Baja las luces!

Lyla, la asistente IA del hombre bajo bastante las luces de la habitación hasta que está quede muy tenue.

-Gracias.

Dijo el Spider-Man. Cerró la puerta de la oficina con llave y volteo a ver a su novia que estaba amarrada a la silla.

-Bueno... Supongo que ya sabes lo que les pasa a los Spider-heros que causan problemas ¿no? Pero... Tu puedes sentirte especial porque al ser mi novia, tendrás un castigo muy especial...

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