"Relatos del Blank Period"🍃

Parte V.

**Relatos del Blank Period**
Parte 5.

🌸Narra Sakura:

Tuvimos una boda muy modesta. En el pueblo dónde nos quedábamos encontré un vestido blanco sencillo. Pasé por una florería y compré un ramo de flores bellísimo,

Sasuke me comentó que debía verlo en el registro civil. Estoy esperándolo, han pasado 10 minutos desde la hora que acordamos y aún no llega, ¿y si se arrepiente y me abandona?
Shanaroo! Odio pensar en cosas tristes...
Después de 5 minutos lo veo llegar, aunque vestía otro tipo de ropa se veía un poco sucio. Se disculpó, ya que en el camino ayudó a atrapar a un ladrón que había asaltado a un anciano.

Proseguimos con el ritual, que no duró mucho. Al fin soy la señora Uchiha! Somos marido y mujer. Quizá no sea la gran boda que soñé ni en compañía de mis seres queridos. Pero realmente me siento muy feliz.

Una semana después, tuvimos la decisión de viajar a otro lugar. Queríamos un pueblo más cálido para vivir mientras concluía mi embarazo. Pero, recibimos un mensaje de Kakashi-sensei, invitándonos a volver al país del fuego, en un pueblo cerca de Konoha.

Después de analizarlo detalladamente rechazamos la oferta en cierta manera ya que estaríamos sí, en nuestro país pero no cerca de Konoha, sino en la frontera con el país del trueno. Estaríamos como a 3 días de distancia.

El viaje fue cansado, sobretodo en las noches. Dormir entre la maleza, Sasuke se negaba a que le ayudara con las guardias nocturnas pues no quería que me desvelara. En el día, él solía dormir pocas horas para así continuar con nuestro camino bajo la luz del sol. Así pasamos 7 largos días caminando y descansando en pésimas condiciones. Por más que mi esposo insistía en que durmiera fingía hacerlo. No podía evitar preocuparme por él.

Me acercaba, lo abrazaba, al menos así le pasaba mis fuerzas, le preparaba píldoras para que soportara la dura rutina. Él me agradecía con besos en la frente.

Hasta que por fin llegamos a nuestro destino. Era un lugar entre las montañas, había cabañas pero estaban muy separadas entre sí. El lugar no resultó ser tan cálido, pero en sí era reconfortante.

Bajando la montaña había un pequeño pueblo de paso, sería útil para conseguir lo indispensable. Habitamos una cabaña que nos habían prestado, cortesía de un amigo de la casa de apuestas que conocía a Tsunade-sama. Con que no apueste la casa tendríamos un lugar seguro para vivir, por el momento.

Al ver una cama dentro de la habitación, Sasuke cayó en un profundo sueño, producto del cansancio acumulado. Mientras, decidí limpiar un poco el lugar, pues también me sentía exhausta.

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Han pasado seis meses. Sasuke todos los días sale a los alrededores a buscar misiones por realizar, ya que donde vivimos resultó ser una montaña céntrica, varios lugares quedan muy cerca que resulta fácil ir y venir.

Yo me quedo en casa todo el día, Sasuke no quiere que me exponga. Me desespero porque quiero ser de utilidad. Lo que hago es bajar al pueblo y dar consultas médicas en un pequeño local.

Me hice amiga de una señora que tiene dos hijas, tienen un puesto de frutas y verduras pero tienen una habitación vacía que no utilizan. Improvise, conseguí una mesa que utilizo como escritorio y una camilla algo vieja para revisión. Mi popularidad ha crecido y gente de los alrededores viene a verme. No realizo trabajo pesado, pero al menos sigo ejerciendo mi vocación. No vuelvo de noche a la cabaña ya que es peligroso.

Hoy volví más temprano de lo usual. Preparé comida, Sasuke no tardaría en volver.
Llegando él, nos dispusimos a comer, tranquilamente, terminando, nos sentamos en un sofá. Prendí la chimenea y me recosté en su pecho. Él acarició mi vientre, sintiendo el chakra del producto de nuestro amor.

-Es tan pequeño...
-¿Crees que sea un niño o una niña, Sasuke-kun?
-Hmmp, lo que sea, con que nazca sano y fuerte cómo tú.
-Sueño con un niño idéntico a ti. Es mi ideal.
Aunque una niña no estaría mal.
-Una niña con tus mismos ojos jade... también me tendría a su merced. Nunca le negaría nada.
-Si se parece a ti Sasuke, lo consentiria siempre.
-Yo debo ser tu único consentido, Sakura.

El Uchiha atrapó la mandíbula de su mujer, hasta probar sus labios. Esos momentos eran tan únicos y los recordarían por siempre.

-Deberíamos ir a Konoha.
-¿Para?
-Quiero que otro médico profesional te revise, asegurarnos que todo vaya bien.
-Está todo bien, Sasuke-kun, soy médico recuerda.
-Podemos ir y regresar.
-Amo esta paz y estar aquí.
-Sakura, recuerda que es temporal, este no es nuestro hogar.
-¿Te digo la verdad?
-Hmp.
-No estoy lista para enfrentar a mis padres.
-No te preocupes, yo estaré siempre a tu lado y he sido responsable contigo, se los haré saber. Aparte es por el bien de nuestro hijo.
-Esta bien... ¿Cuándo nos iremos?
-En dos días. Prepara todo, recuerda que son sólo 3 días de camino.
-Bien...

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