Deseo. [Rubckity]

1. Noche

1.9 Noche de otoño.

Titulo alternativo: Promesa

Hace unos meses atrás, cuando recién habia despertado en este nuevo mundo. Mis ojos fueron una de mis primeras preocupaciones, no eran los ojos azules que eran descritos en el libro para Quackity.

En cambio eran mis normales ojos grises. Ojos grises que asemejaban al negro, ojos comunes y aburridos.

Los ojos grises que eran de mi abuelo y madre.

Mis ojos grises...

El doctor le habia explicado esto a Ana como un posible cambio por la ingesta de nuevos medicamentos y que tenían que notificarlo como posible efecto secundario.

Ana no dio tantas vueltas al asunto.

Solo me miro y me dijo "Los ojos son la ventana del alma señorito, su alma siempre será muy bonita. No importa si es azul o gris."

Pero yo me preocupe aun asi.

Los ojos azules eran una parte muy específica de la descripción física de Quackity, el autor habia dicho que esto no fue al azar.

Quackity azul, Luzu rojo.

Y venia yo a este nuevo mundo con un horrible color gris. Así que aprendi a esconderlos. Agradecía que Luzu no me mirara fijamente al rostro y todo ese tiempo yo jamas lo mire.

Pocas ocasiones juntos cuando visitaba mi habitación la luz era tan tenue que no me preocupe.

El jamas habia visto que yo no tenia los ojos azules.

Con Rubi fue diferente, ella nunca me habia conocido antes, asi que nunca le presto atención a mis ojos.

Pero ahora...maldita sea, me descuide.

—Estas perdiendo la cabeza. — Doy un paso atrás, tratando que el temblor en mi voz no delate el miedo. ¿Acaso me matara ahora?

—¡¿Quién eres?! — Vuelve a preguntar, sujetándome del cuello de la camisa.

—¡Quackity! Soy Quackity, tu consejero, tu amigo, maldita sea Luzu. — Trato de zafarme del agarre, inútilmente —¡Debieron de notificarte antes y no lo recuerdas! Mis ojos cambiaron por la medicina. — Dejo de tocar el suelo, me azota contra el librero detrás de mi, escucho el sonido de libros caer.

—¿Desde cuándo?

—¿Estas ciego? ¡Desde primavera! Mis ojos han sido diferentes desde la maldita primavera. — Me suelta dejándome caer sin cuidado alguno y yo aun en el piso me alejo, parece consternado.

—Me dijeron que habías dejado de respirar. — su voz baja al decir eso —Tu corazón se detuvo y dejaste de respirar, ahora tus ojos...¿Quién eres?

—¡Solo mis ojos cambiaron! Soy Quackity. — Repito, trato de decir una mentira hasta que se vuelva realidad.

—Tus ojos eran azules...— Parece en trance, yo muerdo mis labios.

—Hablemos cuando estes más calmado, Luzu yo...— Me mira con una ira irreconocible, me toma de la muñeca y abre la puerta. —¡Luzu! Me lastimas, detente. —

Me jala por todo el pasillo hasta mi habitación, donde me arroja sin importarle herirme o no.

—Si eres Quackity, cuando sepas el secreto, saldrás de aquí. Hasta entonces ojos grises, no eres nadie. — Mira atrás de mi, donde esta Ana y Rubi, que parecían estarme esperando, eso lo enfurece aun mas.

Toma a Rubi de la muñeca como me tenia a mi hace un momento.

—¡Detente! Lo hare, cuando sepa lo que quieres, te lo dire. No la lastimes. — Suplico desde el piso, Rubi esta aterrada y Luzu parece feliz de tener el control.