Tú Frágil Corazón (Focallete Genshin)

una promesa...

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El tiempo pasa y es algo que no podemos cambiar, para Neuvillete el mundo solo se hizo más gris desde que perdió a su amada, los años pasaron y aún sentía un dolor en el pecho a no tener a su lado a quien su corazón más añoraba, Celestia fue vencida por el viajero y sus amigos, incluido el quien ayudó en lo que pudo. Las naciones se unieron aún más, dejando los prejuicios un poco de lado

Aún había mucho que vivir, pero nada de eso era importante para el en ese entonces, solo continuar con su trabajo como Juez supremo, e ir viendo como poco a poco sus amigos iban pareciendo
"Ahora si creo que no podremos compartir una taza de té amigo.." fue lo último que escuchó de quien pudo considerar un gran apoyo durante la muerte de Furina, pero ahora el líder del Fuerte Metropide junto a varios de sus conocidos, ya no estaban..es tan triste ser inmortal

Ver como todo van pasando sin poder hacer nada, para Neuvillete era un día nuevo, mientras caminaba por las calles de Fontaine hacia el Palacio ya que tubo que salir para revisar algunos documentos. Cerca de su destino habían muchas personas al parecer halagando a alguien, quizá no era nada pero fue en ese momento que sintió algo en su pecho...un pequeño pulso de felicidad y familiaridad, rápidamente volteó pero la persona al parecer ya se había ido

Decidió ignorar aquel sentimiento y continuar con su camino, transcurrió su día con tranquilidad mientras en su mente a veces regresaban los recuerdos de Furina junto a él, sentía la necesidad de volver en el tiempo y poder abrazar lo que alguna vez estuvo en sus manos

Llegó la tarde y la noticia de que tenía una nueva secretaria recorrió todo el Palacio, como siempre se negaba a ver o conocer a sus nuevos empleados, ya que ninguna de ellos le daba esa tranquilidad a la hora de escribir documentos, como lo fue Furina, quien sin ser su secretaria o algo de ese estilo, ya le daba una sensación de calma...

Pero todo cambió cuando volvió a sentir ese pinchazo de nuevo en el corazón detrás de la puerta de su gran sala de Oficina

"El Juez Supremo no desea su presencia señorita"

En ese momento se sintió intrigado al saber que la nueva empleada quería verlo personalmente y ese...Aroma!! Lo reconocía, era como si estuviera volviendo al pasado, sus sentidos eran agudos y ese olor...nunca lo podría olvidar

Decidió ir a la puerta pero cuando la ahrio ya no había nadie, la sensación se iba alejando, en ese momento decidió tomar una decisión, poder quedarse o ver si de verdad...había cumplido su promesa

Empezó a caminar hacia donde su sentido le guiaba, mientras poco a poco se acercaba podía ver a aquella mujer, cabello blanco con pequeños tonos azulados claros, una figura preciosa pero no exagerada, un gorro pequeño pero elegante y sobre todo..

"Disculpe...no es de buena educación mirarme así señor Juez"

Mencionó con una sonrisa pequeña mientras dejaba ver sus ojos con tonos azules y celestes, Neuvillete se acercó lentamente mientras salían pequeña lágrimas de sus ojos, Ella hizo lo mismo, se acercó y puso su mano en la mejilla del dragón

"Una promesa...es una promesa"

Finalmente era feliz de nuevo..Finalmente todas sus penurias se estaban desvaneciendo, ahora solo podía acercarse lentamente a los bellos labios de quien una vez fue su amada y ahora ha vuelto con poco diferencia a sus brazos...su frágil corazón Finalmente pudo volver...