FROM HATE TO LOVE

PARTIDO

Tammy comenzó a cantar el himno, aturdiendo a los presentes en las notas bastantes altas.

—Oh no—nego Jade, cubriéndose disimuladamente sus oídos.

Steve y Robin se susurraron cosas entre ellos, mientras el mayor sacaba los dedos de Jade de sus orejas.

—Eso no se hace-susurro hacia su amiga.

Jade frunció su ceño, -Son mis oídos, yo decido si quiero que escuchen o no.

Ambos rodaron los ojos al mismo tiempo, totalmente desacuerdo uno con el otro.

Lucas volteo a las gradas en busca de sus amigos y su ánimo decayó al no verlos allí, pero luego hizo contacto visual con la castaña, quien agitó su mano emocionada hacia él, sacándole una sonrisa.

Jade podía ser lo contrario a dulce con los demás, pero con Lucas Sinclair todo era diferente.

El niño lograba sacar su lado más blando ante él.

En cuanto el partido comenzó, todo iba tranquilo, empataban, luego un equipo superaba al otro y así sucesivamente.Jade  estaba bastante atenta a lo que pasaba, seguía a todos los jugadores con la mirada, analizaba cada paso que daban y la distancia en la que lanzaban en balón.

Jason, cómo de costumbre, le dedicó un punto a Chrissy.

En el transcurso, alguien del otro equipo empujó a uno de los de la preparatoria Hawkins, ocasionando lesionarlo levemente y que alguien más tuviera que entrar.

— ¡Lucas va a jugar! - exclamo Jade - ¡Steve! —lo sacudió bruscamente-
¡Lucas va a jugar!

Su mejor amigo volteo a verla con diversión y Jade  se dio cuenta de su actitud, por lo que rápidamente borro su sonrisa y lo soltó de la camisa.

Eso había sido vergonzoso para ella.

—Lucas va a jugar—repitió, en un tono mucho más calmado.

El mayor de los hermanos Sinclair entro a la cancha, mientras ahora todo se veía mucho más interesante.

Jason intento hacer un tiro pero falló y eso ocasionó que la multitud exclamara descontento y desesperación.

- ¡Pasen el balón a Sinclair! -grito Jade desde las gradas, obteniendo miradas— iSi, te hablo a ti! -apunto a un jugador.

Steve rápidamente miro alrededor y le cubrió la boca con la palma de su mano, mientras sonreía hacia Brenda quien los miraba con confusión.

Robin reprimió una carcajada al verla así. Eran muy pocas las veces que Jade Walter perdía el control.

Volvieron a intentar anotar y fallaron por segunda vez, pero la esperanza se les devolvió al cuerpo al ver qué
Lucas tomaba el balón antes de que cayera al suelo.

Jade y Steve se levantaron de sus asientos totalmente atentos a lo que sucedía.

El chico Sinclair de un salto lanzó el balón al cesto, y como si todo estuviera en cámara lenta, podían sentir las respiraciones agitadas de los demás, era el punto decisivo.

Todos claramente estallaron en cuanto el balón paso la pequeña red.

Debido a la emoción, Brenda y Steve se abrazaron fuertemente. En cuanto la castaña cayó en lo que estaba pasando bajo unos escalones para ir a felicitar a Lucas.