Cap. 10

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El día del concurso se aproximaba y todos estaban muy nerviosos y estresados por diferentes razones, Jade no dejaba de darle vueltas al asunto de su padre y de Jessica, intento advertirle a Jessica ya que realmente el ser descubierta era algo que no le importaba en ese momento, pero su padre se lo impidió de mil maneras, su misma gente no le permitía acercarse a Jessica, lo que le permitió ver a Jade quienes eran los que trabajaban para él. Por otro lado estaba Tom, pasando unos días terribles por el rechazo de Jade, el decidió darle su espacio para que ambos pudieran pensar con claridad, su madre le dijo lo que ellas dos hablaron y entendió a la perfección el punto de Jade, aun así sin darse cuenta Jade cumplió con el cometido de su padre, ya que Tom se siente desesperado sin Jade, sin sus besos, caricias, su voz, su sonrisa, su risa, su mirada, todos estos días Jade mantuvo las cortinas de su habitación cerrada.

Bill solo se sentía triste ya que extraña mucho a Georg, su mirada, su voz profunda, se dio cuenta que todas esas veces que creyó que Georg lo veía eran verdad, no dejaba de repetir esos dos besos en su cabeza, seguía siendo novio de Tiffany ya que no quería tomar una decisión sin Georg, aun así le costaba mucho trabajo fingir ser un novio amoroso,

- ¿Cómo me fue esta vez? - pregunto Anthony, el chico que remplazaba a Georg para el concurso.

- Te quedo muy bien Anthony - dijo Gustav mientras sostenía los discos de su batería para que dejaran de sonar.

- Gracias por aceptar hacer esto por nosotros - dijo Tom algo serio mientras se quitaba la guitarra para guardarla.

- Gracias a ustedes por pensar en mi - dijo Anthony muy emocionado mientras guardaba su bajó.

- Solo recuerda que es solo para el concurso, el bajista oficial de Tokio Hotel en Georg - dijo Bill de una manera un poco agresiva, los 3 chicos solo lo observaron y él se dio cuenta de su reacción - Pero te agradecemos que aceptaras participar en el concurso con nosotros - se sentía un poco apenado por la forma en la que reacciono.

Luego de un rato los 4 salieron del garaje de Gustav, querían ir por algo de comer, así que se dirigían a una pizzería cercana. Gustav y Anthony platicaban y reían un poco mientras que Tom y Bill hablaron muy poco. Al salir del lugar regresaron a casa caminando, ya que ninguno de los 4 tenían auto propio, lo gemelos solían usar el de su padre, pero se encontraba trabajando, esperaban a que la luz del cruce cambiara para poder cruzar cuando los llantos de un cachorro captaron su atención, sobre todo de Tom,

- ¿De dónde viene ese llanto? - pregunto Tom, los 4 buscaban con la mirada.

Tom entro a un callejón que se encontraba detrás de ellos, se dejó guiar por el sonido y encontró a un cachorrito herido y en muy malas condiciones, estaba muy delgado o más bien delgada ya que Tom se percató que era hembra, era una pequeña pastor alemán,

- Encontré que provocaba el llanto - grito Tom, los otros 3 chicos se acercaron.

- Necesita un médico - dijo Bill.

- Pero la clínica canina está muy lejos para ir caminando - dijo Gustav mientras se ponía en cuclillas para verla de más cerca.

- Yo me encargo - dijo Bill.

Bill saco su celular y no dudo un segundo para marcarle a Jade, ya que recordó haber visto el auto de ellos afuera, últimamente su madre lo usa y su padre usa el otro. Para fortuna de Bill, Jade sigue siendo la misma con él y ahora que ella sabe lo que realmente sienten él y Georg se siente un poco más unido a ella, el celular sonó un par de veces y ella contesto,

- ¿Qué pasa erizo? - pregunto ella al responder la llamada, aun cuando creen que bromeo ella lo dijo de un modo muy sería.

- Jade, ¿Crees que nos puedas llevar a una clínica? - pregunto el chico de cabellos negros.

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