3. Cartas de nadie

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[De vuelta en casa de los Dursley

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[De vuelta en casa de los Dursley. Entran Petunia y Dudley abrigado.]

Petunia: [asegurando a Dudley angustiado] Está bien, cariño. Todo está bien.

[Entran al salón. Entran Lolanthe y Vernon. Vernon cierra la puerta y empuja a Lolanthe contra la pared, tomándola del cabello.]

lolanthe: ¡Ay!

Vernon: ¡¿QUÉ PASÓ?!

lolanthe: ¡Lo juro, no lo sé! [Vernon gruñe] ¡Un minuto, el vaso estaba allí y luego desapareció! ¡Fue como magia!

[Vernon se burla de esto, empuja a Lolanthe en el armario debajo de las escaleras y cierra la puerta]

Vernon: ¡No existe la magia! [tapa el respiradero de la puerta]

Sirius definitivamente no quería saber, no quería tener una respuesta precisa porque sabía que la culpa lo comería nuevamente. Les había hecho una promesa a James y Lily y se las había arreglado para arruinarla la misma noche que murieron. Lo habían perdonado una vez que lo volvieron a ver, pero por algún truco del destino, se le dio otra oportunidad y no la desperdiciaría. Incluso si eso significara simplemente cuidar de su hijo (que parecía haber visto una buena cantidad de horror), haría todo lo posible para demostrar que merecía su título de padrino. "¿Siempre fueron físicamente abusivos?", preguntó, temiendo lo que ella diría.

Si le hubieran preguntado cuando todavía era una simple estudiante en Hogwarts, habría respondido negativamente. Después de todo, la habían acogido cuando nadie la quería, la habían alimentado y vestido. ¿Era justo de su parte menospreciarla? Ahora era mayor, más sabia y tenía su propio hijo. Había acogido a Teddy tan pronto como se dio cuenta de su propio embarazo y lo cuidó lo mejor que pudo. "Ellos... no fueron crueles, pero se aseguraron de hacerme saber que era una carga". No quería decir nada más: los Dursley habían sido el menor de sus problemas durante tanto tiempo que era casi ridículo imaginar que habían dejado una huella en ella.

Sólo cuando sintió que su hijo la abrazaba como si estuviera a punto de hundirse en el mar, comprendió que otras personas tal vez no lo vieran de esa manera. Especialmente no cuando Percy siempre había sido amado y apreciado, cuando ella lo había puesto en un pedestal y se había asegurado de hacerle saber que nunca había sido un error. Cuando era más joven no había sido fácil para él ir a la escuela y descubrir cuán joven era Lolanthe en comparación con los otros padres, especialmente cuando eran parejas que venían a recoger a sus hijos y ella tuvo que decirle que su padre no podía estar allí. ahí para él.

"¿Por qué está tan en contra de la idea de la magia?", preguntó Nico. Aunque había entendido que no todo estaba bien con la imagen de Sally Jackson que tenían en mente, eso no significaba que había entendido que ella nació bruja.

[Un búho aparece volando y se posa en una antena de televisión en el tejado de una de las casas]

[Lolanthe sale de la sala de estar hacia el pasillo y recoge algunas cartas, una de las cuales tenía su nombre con la dirección del lugar donde dormía. El tío Vernon y Dudley se sientan a la mesa mientras la tía Petunia está ocupada preparando el desayuno. Lolanthe entra con el correo y se lo entrega al tío Vernon, luego camina hacia su asiento con su carta.]

Eudaemonia; pjo×hpDonde viven las historias. Descúbrelo ahora