My heart, why are you so far away?

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En el vasto lienzo de la vida terrenal, el destino teje sus hilos como la gracia de un artista celestial

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En el vasto lienzo de la vida terrenal, el destino teje sus hilos como la gracia de un artista celestial. Desde el primer aliento de vida, cada uno de nosotros está unido a otro ser por un vínculo sagrado, una sinfonía de destinos entrelazados que se manifiesta en el resplandor de un hilo escarlata, cuya luminosidad solo se despierta en el umbral de la adolescencia, listo para guiar nuestros pasos hacia el encuentro con nuestra otra mitad.

Es un vínculo que trasciende el tiempo y el espacio, guiándonos con la suavidad de una brisa cálida hacia aquellos que están destinados a compartir nuestro camino. Con cada encuentro fortuito, con cada mirada que se cruza, el hilo rojo se tensa, recordándonos que no estamos solos en este vasto universo.

Pero así como el hilo del destino puede tejer maravillas de amor y conexión, también puede traer consigo una sombra oscura para aquellos que no tienen su hilo atado. Hay quienes, al nacer, encuentran sus corazones huérfanos de ese lazo que los conecta a su destino, aguardando con fervor el momento de cruzar caminos con su contraparte predestinada. Puede ser que un giro trágico del destino haya segado prematuramente la vida de su alma gemela, antes de que el hilo del destino se entretejiera completamente, o tal vez, simplemente, estuvieron destinados a pasear solitarios por la vastedad del cosmos. Son los elegidos por la rareza, los guardianes de la melancolía en un mundo bañado por la luz del amor eterno.

En la penumbra de su singularidad, encuentran refugio en la compañía de aquellos cuyas almas resonan en la misma frecuencia de soledad, o en la esperanza de aquellos que aún no han descubierto la melodía de su alma gemela. Son los solitarios navegantes en un océano de conexiones, los buscadores eternos de su reflejo perdido en el firmamento de los destinos entrelazados, anclados en la tierra pero con los corazones anhelando unirse en un baile eterno de amor y redención.

WHITE RIBBON.       charles leclerc.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora