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Momentosen los que se dieron cuenta que ella era especial para el.
● Kyle Broflovski
Era bien sabido que Cartman se la pasaba molestando y burlándose de Kyle por ser judío y entre más cosas. Siempre qué un plan no salía, iba y culpaba a Kyle, con excusas tontas.
—¡Maldito judío, todo es tu culpa porque traes tu presencia judía y eres un marica!
Kyle frunció el ceño al escuchar aquellas palabras, Stan intentaba calmar las cosas junto a Kenny pero Cartman seguía y seguía. Hasta que Kairi explotó y empujó a Cartman, cayendo en la nieve.
—¿Puedes callarte Cartman? Esto es tu maldita culpa porque decidiste llegar a la hora que tu culo gordo quiso, deja de culpar a Kyle y si vuelvo a escucharte llamarlo judío o algún otro nombre qué sea para molestar te voy hacer tragar tu propia mierda.
Cartman se quedó sorprendido, todos se quedaron así al escucharla hablar de tal manera. Kyle sonrió al escucharla defenderlo, su corazón latió rápido y sus mejillas se sonrojaron, pero antes de que ella se aventara a Eric, Kenny la detuvo tratando de calmarla.
—Maldición, eres una maldita perra.
—¿Quieres ver lo perra qué puedo llegar a ser, gordo imbécil?— exclamó enojada. Kyle se acercó y la apartó de él, tomándola de las manos.
—Tranquila, muchas gracias por eso.
—¡Es que es un imbécil! Estoy harta de que te hable así— añadió entre algunas lágrimas, Kyle la abrazó y besó su frente con ternura.
—Eres increíble.
● Stan Marsh
El pobre había tenido una semana horrible, además de que Wendy no lo dejaba en paz, ella buscaba la manera de acercarse a él y también hacerlo sentir mal. Un tanto complicado esa relación rara qué tenían.
Además se había peleado con el grupo, por tonterías.
Se detuvo al verificar que estaba enfrente de la casa de Kairi, pensó algunos segundos si llamar a la puerta o no.
—Oh, Hola Stan— saludó ella qué venía detrás de él con algunas bolsas del supermercado, el pelinegro se dio la vuelta y le sonrió— Ven aquí.
Stan fue a ella con lágrimas en los ojos y la abrazó, ella lo consoló y se sentaron en la banqueta para comer algunas galletas qué ella había comprado.
—Te semana ha sido una mierda.
—Si, bastante.
—Deja de preocuparte por todo, se que es difícil, pero ¿por qué no tratas de ignorar a Wendy? A ella le gusta la atención que llegas a darle y Cartman, bueno, es Cartman, apuesto a que terminará hablandote porque no puede vivir sin sus amigos.
Stan sonrió un poco.
—¿Por qué siempre eres linda conmigo?
—Porque eres especial para mi.
—Tu también lo eres para mi.
● Craig Tucker
Aburrido. Así se sentía en el salón de retencion, se había metido en problemas otra vez, como ya era costumbre. Solamente que no había sido su completa culpa, pero ni siquiera le interesaba discutirlo, ya esta acostumbrado a estar en aquella sala.
—¿Por qué siempre te metes en problemas. Craig?— preguntó el Sr. Mackey a lo que Craig solo alzó los hombros.
Ambos miraron como alguien tocaba la puerta, El Sr. Mackey abrió y Kenny, con una peluca larga y un vestido de princesa junto a Kairi con un traje negro entraron al salón.
—¿Quienes son ustedes?
—Ella es la princesa Kennycienta y yo soy su protector, venimos a llevarnos a Craig, es de suma importancia— actuó Kairi.
—¿Por qué razón?
—Porque...porque...ah si, porque Craig fue elegido para casarse con la princesa y nos lo llevaremos a...a París, ahí será la ceremonia— añadió mientras se acercaba a Craig para tomarlo de la mano e intentar escapar lo más rápido posible— Ayúdame con esto.
—Oh, mi princesa, cuánto te he extrañado— añadió El pelinegro abrazando a Kenny— Debemos irnos, la boda esta por empezar.
—Si, Váyanse, felicidades a los dos, Craig no te metas en problemas— añadió el profesor, los tres sonrieron y salieron corriendo de la escuela.
—JAJA, No puedo creer que se lo haya creído todo— dijo ella— muchas gracias Kenny, te devo una— el rubio sonrió y se alejó de ellos.
—¿Por qué hiciste eso?— preguntó Craig
—No merecías estar ahí, además quedamos en ir al lago, ¿no?
Este sonrió, se dio cuenta que ella había sido increíble, lo que había hecho, agarró su mano y se fueron corriendo.
