Capítulo 26 - De la Tierra a las estrellas.

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Los pasillos alienígenas resonaron con el sonido de ocho personas de distintas edades corriendo a través de ellos como si sus vidas dependieran de ello. Lo cual hicieron mucho.

Si bien existían muchas puertas a los lados del largo y curvo pasillo, todas estaban selladas. Parecía que el grupo había decidido seguir a su líder, en este caso Nezu, y continuar yendo tan lejos como pudieran antes de verse obligados a detenerse.

"Oye Wedge, por casualidad no conoces el camino por aquí, ¿verdad?" Preguntó el Sr. Oguro mientras corría. "Vuelas uno de esos prototipos elegantes, ¿verdad? ¿No lo habrías recogido en algún lugar cerca de aquí?"

"No puedo confirmar ni negar haber visitado esta base militar en particular". Dijo Wedge, con una voz que decía lo contrario. "Pero si tuviera, digamos, pruebas de prototipos de aviones por aquí, me imagino que no me habrían invitado al sótano alienígena secreto durante el proceso".

Melissa dejó escapar un resoplido cuando finalmente llegaron al final del pasillo y corrieron hacia otra puerta. Nezu rápidamente comenzó a trabajar en ello como el anterior, y todos continuaron recuperando el aliento. Especialmente Sam y los niños.

"Oh hombre, no he tenido que correr así en mucho tiempo". El hombre más grande gimió, estirando la espalda.

"Eso es gracioso. Me siento bien". Dijo Katsuma, su cuerpo circulando con una energía verde.

"Eso es porque estás usando tu Quirk, tonto." Señaló Kota, mientras se inclinaba. "Mi garganta está tan seca... Me pregunto si puedo beber el agua de mi Quirk. Eri, ¿quieres probar un poco de agua?"

"No estoy bien." Dijo Eri, con las mejillas sonrojadas por el esfuerzo. "Estoy, umm, acostumbrado a correr así".

Melissa no pudo evitar estremecerse ante la declaración de Eri. Nadie debería tener que correr así para salvar su vida, y mucho menos estar acostumbrado.

Miró al resto del grupo, pero parecían estar bien. Wedge era piloto militar y sin duda la persona más atlética entre ellos. El Sr. Oguro se encontraba en un estado similar y ahora tenía un cuerpo que tenía en el mejor momento de su carrera. E Izuku había hecho mucho entrenamiento de resistencia para tomar el Quirk del tío Might como propio.

La propia Melissa estaba en buena forma, pero no estaba ni cerca del nivel de Izuku. Estaba empezando a sentirse contenta de que Nezu le hubiera obligado a tomar algunas lecciones de educación física en la UA durante la semana que estuvieron allí.

"¿Hola Melissa?" Dijo Izuku, y ella se volvió hacia él. De repente parecía muy avergonzado, sosteniendo en sus manos la máquina de amplificación Quirk que había usado contra Nueve. O al menos, lo que quedaba del dispositivo. "Lo siento, pero creo que rompí el dispositivo en el que estaban trabajando tu padre y el Sr. Abrahams".

Las puntas del lado izquierdo se habían roto en varios puntos y ahora faltaban, y el resto del dispositivo tampoco se veía muy bien, ahora que lo había visto bien.

"Está bien chico". Dijo Sam, quitándole el dispositivo con cuidado. "Es una pena que se haya dañado. Esta cosa era única en su tipo".

"¿Qué pasa con el escáner?" Preguntó Izuku, metiendo la mano en el bolsillo trasero y sacando el dispositivo que su padre había introducido de contrabando en Japón con ellos. "¿Quizás podrías hacerlo funcionar con esto? Era un prototipo, ¿verdad?"

"Hmm. Fue hecho usando partes similares. Pero Dave trabajó en eso más él mismo, así que no me sentiría seguro al intentar hacerlo solo". Explicó Sam, guardándose el escáner en el bolsillo. "Además, el efecto de impulso fue exclusivo del modelo terminado. Incluso si lo pusiéramos en funcionamiento, sólo estaría al 50% de su capacidad".

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