Capítulo 3

13 2 0
                                    

Un día, Amanda busca a Anthony con un regalo y una carta en manos por toda su escuela durante la hora de receso. Cuando por fin logra encontrarlo, le entrega el regalo y le aclara que "es de parte de Becky", Anthony lo acepta y regresa a su salón de clases. Poco antes de que terminara su descanso, Anthony decide abrir primero la carta y se da cuenta que era una dedicatoria:
"Para que tengas algo de mí a pesar de que me encuentre lejos ❤.
                                   Con Amor, Becky".
Cuando Anthony decide abrir el regalo, abre una caja pequeña con un lazo en la tapadera, eran 3 ligas de colores diferentes (blanco, azul y verde) con perfume de mujer. Anthony emocionado, rápidamente toma la Liga de color blanco y la coloca en la muñeca de su mano derecha, dónde a Anthony siempre se le veían usando pulseras y una esclava de plata.
Al día siguiente a la hora de salida, Anthony habla con Amanda y de favor de pide que le entregue un regalo a Becky de parte de él, era una sudadera de Anthony empapada en su perfume; Amanda le responde con una gentil sonrisa que se lo hará llegar. Amanda por fuera se le veía algo emocionada pero por dentro estaba gritando de la felicidad.
Anthony contaba sobre como " Becky " era una chica amable, linda, inocente, pero sobre todo contaba que ella jamás lo lastimaría (Anthony tenía una idea MUY errónea de Becky).
Una día Brynn estaba platicando con Anthony en su salón de clases sobre como "Becky" estaba perdidamente enamorada de Anthony. Brynn toma su celular y le enseña a Anthony una conversación que tuvo con Becky, en el cual aparece un mensaje por escrito de Becky el cual decía:
-Es que Anthony está muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy guapo.
Esto a Anthony le causo risa y mucha felicidad, con el tiempo a Anthony se le notaba más feliz, más alegre, más calmado, parecía como si Becky hubiera llegado a sanar algo que no estaba dañado.

Me Gustas Como Para Asumir Las Consecuencias ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora