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•Capítulo 04•

•Capítulo 04•

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—¡Métanle al trote, pelotudos!—gritó Agus cubriéndose con su campera encima de su cabeza corriendo junto con los demás siguiendo su paso

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—¡Métanle al trote, pelotudos!—gritó Agus cubriéndose con su campera encima de su cabeza corriendo junto con los demás siguiendo su paso.

O más bien, intentando. Ya que a Cecilia por su parte, se le dificultaba bastante seguir a los demás debido a sus botas de tacón de medio metro.

Y ni hablar de Lola, que tenía lo mismo de cardio que de bostera, Parecía perro asmático ahogándose.

Justo ese día tenía que largarse a llover, que paja.

Lola puteaba mentalmente a todos estos gorreados que acordaron la juntada y ni se fijaron en el pronóstico.

—¡No sean forros, me están re dejando atrás!—se quejó Ceci que en cualquier momento se quebraba el tobillo con tremendas máquinas de guerra en cada pie.

—¡Y bueno mami, quitate esas porquerías!—señaló su amiga como ortiva sin detener su movimiento.

Para la suerte de la rubia, Equi se volvió y el fantasma flasheando que era Romeo la alzó tipo "princesa" y siguió corriendo con ella en sus brazos.

Que virgen, por Dios. Pensó la morocha con una mueca.

Pero obviamente su meju pensaba todo lo contrario que mostró una sonrisita con las manos en el pecho del pibe y le exclamó un "Gracias".

Por otro lado, los más egoístas, Cristian y Agus iban delante de todos sin importarles un carajo.

—¡Lola, vení que te cubro!—la llamó su amigo Lucas a su lado mientras los truenos resonaban.

—¡¿Cubrirme con qué, pelotudo!?, ¡Si ni trajiste campera!—le contestó con bronca como si la estuviera cargando.

—Pero yo sí—escuchó ya la voz familiar de la persona que no bancaba a su lado mientras sentía que las gotas de agua ya no le caían encima.

Lola ; Colo BarcoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora