𝐋𝐚 𝐇𝐚𝐛𝐢𝐭𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝟓𝟏𝟐

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟐

-¿Habitación 512? Pero esa habitación es solo para pacientes que serán desahuciados!- dije exasperadamente

-Doctor, al Niño no le dan más de tres meses de vida...- me respondió tristemente nami

Me ofendí ante esa respuesta
-Espera, si a zoro lo han declarado desahuciado y no le dan más de tres meses de vida... ¡¿por qué me lo han encargado a mi?! ¡¿A caso quieren que me devore la prensa cuando muera?!- grité tirando los papeles de mi escritorio

-Doctor... no se nada... esas fueron mis órdenes, el paciente zoro no vivirá por mucho...-

-Eso lo veremos- dije para tomar mis cosas y salir a paso ligero de mi consultorio , iba con todas las venas marcadas en mi rostro, la sangre me hervía de enojo y mis colegas en el pasillo lo notaban pero poco me importó

Me paré frente a la puerta y suspiré para tomar la perilla y abrirla lentamente

primero metí mi cabeza , estaba todo silencio por lo que dirigí mis ojos de izquierda a derecha hasta que se posicionaron en aquella camilla Justo al centro de la habitación.

Ahí yacía un pequeño Niño de cabellos verdes , con camisón blanco , con muchas agujas intravenosas en sus manos , parecía dormir muy profundamente que no quise despertarle

Entré por completo a la habitación cerrando la puerta tras de mi, acercándome cada vez más al pequeño, su respiración era un poco agitada, me senté en el borde de la camilla, quería examinar bien al chico... tenía muchas ojeras bajo sus ojos, de una persona adulta como torao era entendible pero de un pequeño.... Sus pequeñas manos tenían cientos de agujeros debido a sus tratamientos...

Mientras lo veía detenidamente, solo éramos yo y el tic... tic...del monitor cardiaco que yacía a un lado del niño.

Tome su mano, y dije en forma de susurro...
-No se que haré contigo... pero... te vas a recuperar, lo sé- 

De pronto sentí como los dedos de su mano hicieron un pequeño espasmo brusco, seguidamente sus ojos comenzaron a apretarse para luego abrirse de golpe

Sus pequeñas pupilas marrones me buscaron en aquel desespero que el pequeño de cabellos verdes estaba sintiendo

-¡Oye.. oye! Tranquilo pequeño....-

-eh... eh... ¡aléjate de mi! ¡ ¿Que estoy haciendo aquí? ¡¿Que es este lugar?!-

-Tranquilo, estás seguro conmigo- le dije de manera cálida a lo cual fijó sus ojos en mi y posó su mano sobre la mía ladeando la cabeza

-¿Lugar... seguro?- preguntó a lo cual yo asentí de vuelta

-¿Cual es tu nombre?-  me preguntó

-Mi nombre es Luffy- 

-¿Luffy? Es lindo... - dijo el pequeñó a lo que apareció un sonrojo leve en mis mejillas, nadie nunca me había dicho que mi nombre era lindo

Además dicen que los borrachos y los niños dicen la verdad , por lo que me reí levemente  y acaricie sus cabellos verdes

-Desde ahora seremos tú y yo ¿de acuerdo?-

-¿Tú y .. yo?... -dijo con duda en su voz

-Claro pequeño , Bien... es hora de tu análisis de sangre antes que comas ¿de acuerdo?

Mientras preparaba todo para el pequeño, le di la espalda, sentía como me observaba, debía ganarme su confianza con el tiempo para que no tuviera miedo de mi