- Mar, ¿Cuántas veces más necesitas pasar por esto? Se que le quieres de verdad, pero no te puedes enganchar a él cuándo claramente ya no quiere nada – me encontraba en los brazos el, la única persona que siempre me escucha y me entiende –
- Lo sé, pero de verdad lo quiero, y quero que funcione, no se que hacer para agradarle o volver a gustarle el – el solo limpiaba mis lagrimas mientras me abrazaba - ¿Qué hice mal? –
- Nada, nunca lo has hecho, que él te ha adjudicado y eso ya es hora de cambiarlo, porque solo te lastima a ti – nos quedamos en silencio –
- Me tengo que ir, mi mamá ya me llamo muchas veces, ¿me puedes llevar? – él no me dijo una palabra, solo asintió –
- Ponte la chamarra o te vas a enfermar – me dio su chamarra, me la puse y bueno me llevo en su moto a mi casa –
Al llegar mi mama estaba afuera ya esperándome
- Descansa pulga, te veo mañana e, no se te olvide –
- No, mañana te regreso tu chamarra ¿sí? – el solo me abrazo y me dio un beso en la cabeza – también descansa
Al entrar a mi casa mi mamá me dio una mirada de tenemos que hablar y tome asiento enseguida
- Ya se que me tarde, si e dije que temprano, pero bueno las doce no es tan tard. – me interrumpió a media frase –
- Sabes que no me refiero a eso, ese niño te quiere de verdad cielo, se le nota en todas las acciones que tiene contigo – la mire mal, sinceramente –
- Mamá acabo de terminar con Carlos y no creo que sea el momento de que me digas esas cosas, porque mas confundida voy a estar – ella no dijo nada, que casi lo preferí – iré a dormir, mañana tengo cosas que hacer -
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Tú, yo y el mar
RomanceUn engaño suele doler, depende de la persona con que intensidad nos marque. La historia de Marian es un claro ejemplo del como las chicas pueden perderse de nuevos y verdaderos amores reales por aferrarse a uno solo. Es un ejemplo de que el amor pu...