La Pesadilla de Despertar

La Vida Ya No Sigue Para Mi

Pasaron varias semanas, mi relación con mi padrastro no era buena ni mala, de hecho, llevábamos al rededor de 2 meses sin hablar luego del gran suceso, por otro lado, la relación con mi mamá empeoraba cada dia más, todo eran peleas, gritos, regaños, golpes y demás.

Uno de esos días que ya se habían vuelto normales para mi; acababa yo de almorzar, era fin de semana, me dirigía hacia mi cuarto y justo en el momento en que intenté pasar por el pasillo se me apareció en frente mi padrastro, creí que iba a ignorarme como los últimos 2 meses pero contrario a lo que creí no quiso dejarme pasar por lo que lo mire con mi típica mirada de rabia y fastidio, esto hizo que se enojara y comenzará a regañarme y gritarme. Luego de unos 10 minutos gritándome dijo:

- Si guerra quiere guerra le voy a dar, no me importa lo que tenga que hacer para hacerle la vida imposible, incluso si tengo que usar a su mamá en su contra, no me importa, voy a hacer todo lo que me sea posible para hacerle la vida imposible y vamos a ver quien termina ganando de los dos.

En ese momento no le tome gran importancia a su amenaza, estaba acostumbrado a que siempre me amenazara y nunca hiciera nada, lo que no sabía era que esta vez iba a ser real y que me lo estaba tomando muy a la ligera.

A partir de ese día el me gritaba a diario, me insultaba, en ocasiones me pegaba con diferentes objetos como el control del televisor, el celular, me tiraba a la cara cualquier cosa que tuviera a la mano y me enterraba las uñas en las orejas hasta hacerme sangrar, también, solía inventar cosas como por ejemplo, que tenía conversaciones subidas de tono con amigos o que llevaba muchachos a la casa cuando me quedaba solo.

Gracias a su gran imaginación y control sobre mi mamá logro hacer que ella me llevara siempre al trabajo y que si por alguna razón tenían que dejarme solo en casa quedaba completamente encerrado bajo llave.

Al estar tanto tiempo con mi mamá nuestra relación se deteriorada cada vez más, cada día eran más frecuentes los golpes, los gritos, los insultos y los regaños. Aburrido de tanto comenzaba a salir toda la tarde solo a caminar o a hablar con mis amistades de la cuadra y regresaba cuando ya era hora de cerrar el local, esto obviamente le molestaba a mi mamá ya que no estaba nunca para hacerle su trabajo o por lo menos hacer mis tareas temprano.

Uno de aquellos días, tenía al rededor de 11 tareas acumuladas así que decidí que era momento de empezar a hacerlas para desatrazarme aunque fuera un poco así que desde temprano comencé a hacer mis tareas, una vez llegamos a la casa me senté en el comedor a continuar con mis deberes.

Eran al rededor de las 8 de la noche, aun me quedaban unas 6 tareas por terminar, eso hasta que de la nada llegó mi mamá a regañarme como siempre, yo quería terminar mis tareas rápido así que como siempre la ignore, pero esta vez algo cambió, ella se enojo un poco de más y lo primero que hizo al darse cuenta de mi indiferencia fue ir a coger la cadena del collar del perro y comenzar a pegarme con eso en la espalda, mi reacción como siempre fue totalmente nula, lo cual hizo que se enojara aun más por lo que simplemente decidió que lo mejor era tomarme del cabello fuertemente y golpearme la cabeza repetidas veces contra la mesa del comedor con todas sus fuerzas, claro que dolía, pero realmente mi dolor y agobio mental opacaban completamente el dolor físico así que apenas podía sentir unos pequeños golpes casi imposibles de percibir por lo que no fue suficiente para hacerme llorar, esto la hizo perder aún más la paciencia al ver que yo no soltaba ni media lagrima a pesar de que estuviera usando toda su fuerza así que fue por un cinturón común para seguir pegándome con eso mientras seguía gritándome y diciéndome que no podía creer posible el hecho de que pegándome con todas sus fuerzas yo no soltaba ni media lagrima pero que al hablarme lloraba como si estuvieran torturandome, sinceramente esto me causaba risa, el hecho de ver su reacción a mi comportamiento y el como perdía cada vez más la paciencia de cierta forma era reconfortante para mi.

Se canso finalmente cuando era al rededor de las 12:30 de la madrugada, me dijo que terminará mis tareas y de fue a dormir como si nada hubiera pasado, una vez me asegure que ya no estuviera cerca y pudiera escucharme comencé a reír en voz baja ya que no podía aguantar más el impulso.

La verdad mi espalda había quedado molida luego de 4 horas seguidas de golpes interminables y sentía que no podía ni mantenerme en una posición cómoda durante más de 30 segundos sin que el dolor me molestara así que espere una media hora a que mi mamá se durmiera y me fui a dormir también, mi día había sido agotador y ya era tarde.

Me dirigí a mi habitación, guarde todos los cuadernos qué iba a necesitar para mis clases de ese día e intente acostarme a dormir, aunque me costó un poco debido a la molestia y el dolor finalmente logre quedarme dormido a pesar de que este gran dolor iba a durarme toda una semana acompañado de grandes moretones, inflamación y dificultad para poder caminar.

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Después de como 91829282982 siglos sin publicar cap después de decir que lo haría 2 días a la semana les traigo un nuevo y hermoso capitulo para nada traumante
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